Luna Negra y otros motivos para mirar al cielo este fin de mes Copiar al portapapeles

Este fin de abril y principio de mayo trae consigo algunos eventos astronómicos. El primer eclipse solar del año nos hará ver un evento poco común: una Luna Negra. A esta le seguirá la conjunción de Venus y Júpiter.

Unos días después llegará una lluvia de estrellas (aunque sería más adecuado hablar de meteoros). En los próximos días habrá que levantar los ojos al cielo y no moverlos de ahí por algún tiempo.

Una serie de eventos astronómicos afortunados

La Luna Nueva ocurre en el momento en que la cara visible del satélite está completamente oculta por el Sol. Sin embargo, es común leer que se anuncia una Luna Nueva que podremos apreciar desde nuestras ventanas. Existen dos eventos astronómicos que suelen recibir este nombre.

El primero es la Luna Nueva astronómica o Luna Negra. Esta primera es casi imposible de ver, a menos que coincida con un eclipse solar, y eso ocurrirá el 30 de abril. El segundo evento al que llamamos Luna Nueva es la tradicional, que en realidad es el comienzo de la Luna Creciente porque ya comienza a verse un pequeño fragmento iluminado.

La Luna Nueva astronómica del 30 de abril coincidirá con el primer eclipse solar del año. Así que, aunque la cara visible de nuestro satélite se mantenga oculta, sabremos que está ahí porque veremos su paso frente al Sol. Otra coincidencia es que llegará cuando termina una de las festividades religiosas más importantes en el mundo: el ramadán islámico.

La Luna de Shawwal es el momento en que comienza la fase creciente de la Luna en el mes islámico del mismo nombre. Esta fecha indica la celebración de Eid Al-Fitr, con la que termina el mes sagrado de los musulmanes.

Además de la Luna, otros cuerpos celestes ofrecerán espectáculos fuera de lo común, entre ellos Venus y Júpiter. El 30 de abril estos dos planetas, separados por una enorme distancia, se acercarán en el cielo terrestre. El evento ocurrirá a las 6:42 pm, de acuerdo con el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE).

El acercamiento ya es visible desde el miércoles  27 de abril; sin embargo, el punto máximo de acercamiento será el sábado cuando aparentemente se acerquen a una distancia menor que el diámetro de la Luna. La conjunción ocurrirá en la constelación de Piscis, hacia el suroeste. El evento podrá observarse si la noche está despejada. A partir del primero de mayo comenzarán a separarse nuevamente.

Finalmente, vendrá una lluvia de estrellas. Los meteoros se originan en el cometa Halley, de él se desprenden partículas que forman una serie de anillos de rocas. El mejor momento para observar a las Eta Acuáridas será el 5 de mayo al amanecer. La Luna Creciente iluminará el cielo y no habrá contaminación. La cantidad de estrellas fugaces (meteoros) que se verán es de entre 20 y 30 por hora.

Los eventos astronómicos son una buena oportunidad para levantar la vista y apreciar el firmamento. No todos serán visibles desde México. El eclipse solar podrá apreciarse en algunos países de América Latina, entre ellos Argentina, Brasil, Bolivia, Chile y Uruguay. Desde México será necesario recurrir a instrumentos especiales como telescopios si se quiere apreciar este fenómeno.

Los eventos astronómicos seguirán durante el año. El cierre de abril es una buena oportunidad para desempolvar telescopios, binoculares o el instrumento de nuestra elección. Bienvenido mayo con distintos motivos para recordarnos que aún cuando un evento es previsible, no deja de ser sorprendente.