La NASA recrea el sonido de un agujero negro Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
11 mayo, 2022
Los agujeros negros son cuerpos celestes enigmáticos sobre los que hemos conocido algunos detalles en las últimas décadas. Sabemos que incluso la luz queda atrapada en ellos pero, ¿qué pasa con el sonido? Existe la creencia de que el sonido no viaja por el espacio y aunque un agujero negro tuviera sonido no viajaría hasta nosotros.
Gracias a los registros del telescopio de rayos X Chandra, ahora podemos imaginar su sonido. La Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio estadounidense (NASA) realizó una sonificación que ya puede escucharse en la red.
Un sonido más allá de nuestro oído
Si el sonido viaja a través de un medio podría pensarse que no se desplaza en el espacio, que tiene fama de estar vacío. Para moverse a través del espacio, el sonido requiere algún material y en esta ocasión fue el gas. El sonido que distribuyó en los últimos días la NASA proviene del cúmulo de Perseo. Dentro de él existen grandes cantidades de gas en donde se encontraron ondas de presión.
El agujero negro envió ondas de presión en donde se generaban ondulaciones en el gas caliente. Esas ondas podrían interpretarse como sonido. Si bien, este agujero provocó un sonido por sí mismo, las ondas que llegaron hasta el telescopio de rayos X Chandra son muy distintas a las de los sonidos que somos capaces de percibir.
La “sonificación” es una técnica que traduce datos astronómicos a sonido. Ya se ha utilizado antes, aunque no de la forma que se hizo con el agujero negro del cúmulo de Perseo. La información que recibió el Chandra podría interpretarse como una nota. Esta se ubica 57 octavas por debajo de Do medio; esto quiere decir que nuestros oídos son incapaces de reconocerla. Para conseguir que las ondas fueran reconocidas por un oído humano se les escaló entre 57 y 58 octavas por encima de la nota original.
Si lo vemos como una partitura, lo que publicó la NASA no es el sonido del agujero negro, sino un cover.
Visto en cifras, se amplificó el sonido entre 144 y 288 cuatrillones de veces para que la frecuencia fuera más alta que la original; a estos números se les puede agregar 12 ceros para dimensionarlo. A diferencia de otras sonificaciones que se han hecho sobre eventos astronómicos, en esta ocasión se tuvo la referencia del sonido original.
Perseo es una constelación visible en el hemisferio norte. Es una de las 48 constelaciones Ptoloméicas y una de las 88 constelaciones modernas. La época del año en que se vuelve más popular es agosto, cuando llega la temporada de las Perseidas, una lluvia de meteoros. Para ubicarla se puede buscar alguna de las que le rodean como Casiopea, Andrómeda o Auriga.
Los agujeros negros siempre han despertado nuestra curiosidad. La sonificación del agujero en el cúmulo de Perseo no es la única para un objeto celeste de este tipo. Messier 87 (mejor conocido como M87) se hizo famoso en 2019 al ser captado en imagen por Event Horizont Telescope (EHT); la NASA también hizo una sonificación de este agujero negro.
Lo que hace especial al sonido del el cúmulo de Perseo es que realmente proviene de ondas de sonido que viajaron a través de gas caliente a través de ondas de presión.
El trabajo de la NASA, por decirlo metafóricamente, consistió en subir el volumen hasta que nuestros oídos pudieran reconocerlo. Por mucho tiempo se ha creído que el universo es mudo pero tal vez sólo no estamos preparados para escucharlo. Parafraseando a Marty McFly, podría ser un clásico que le encantará a nuestros hijos.