Los flujos de ríos han cambiado drásticamente a causa de las actividades humanas Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
2 julio, 2022
Los ríos cumplen funciones importantes en los sistemas ambientales con los que interactúan. Un estudio recientemente publicado por la revista Sciences evalúa el impacto de las actividades humanas en 414 de los mayores ríos en el mundo. Los investigadores se enfocan en la cantidad de sedimentos que los ríos transportaron hacia los océanos en las últimas 4 décadas.
Como parte de sus resultados se muestra que la tendencia en los hemisferios norte y sur son contrarias: mientras que en el norte han disminuído; en el sur, aumentaron. La forma en que nuestra especie ha transformado el entorno de los ríos es distinta y tiene efectos diferentes en los dos hemisferios.
Si el río suena, ¿qué lleva?
El documento comienza recordando la importancia ecológica de los ríos, así como su gran valor para nuestra especie. Como parte de la investigación se plantea que los sistemas de ríos se han visto afectados por las acciones humanas.
El equipo de investigadores del Departamento de Geografía del Colegio Dartmouth, en Hanover, New Hampshire (Estados Unidos), recurrió a datos satelitales que se han recopilado desde la década de los 80 del siglo pasado. El periodo que se analizó va de 1984 a 2020.
Las fuentes para obtener datos fueron los satélites Landsat de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio estadounidense (NASA), así como archivos digitales con información hidrológica.
Se retomaron datos sobre la concentración de sedimentos suspendidos y el flujo de 414 ríos, los mayores en el mundo. Los sedimentos se componen principalmente de arena, limo y arcilla. Estos materiales tienen una función ecológica importante ya que funcionan como hábitat para organismos que habitan río abajo y en las desembocaduras.
También para los seres humanos son de gran importancia pues reabastecen de nutrientes los suelos agrícolas inundables, y al mismo tiempo amortiguan el aumento en el nivel del mar al llevar arena hacia deltas y costas.
“La cantidad de sedimentos que los ríos transportan es generalmente dictada por procesos naturales en las cuencas hidrográficas, como cuánta lluvia hay o si hay deslizamientos de tierra o vegetación. Encontramos que las actividades humanas directas están abrumando estos procesos naturales, e incluso superando los efectos del cambio climático”, explica Evan Dethier, quien es investigador postdoctoral en Dartmouth y aparece como primer firmante en el estudio.
Tanto las acciones humanas como los efectos en el flujo de los ríos son distintos en los hemisferios norte y sur. Para el hemisferio norte (América del norte, Europa y Asia) la construcción masiva de presas ha disminuído la cantidad de sedimentos que llegan al océano en 49%, respecto a la época previa.
Por su parte, el hemisferio sur (America del sur, África y Oceanía) han sufrido cambios importantes en el uso de suelo, principalmente por deforestación, lo que ha incrementado la cantidad de sedimentos que transportan los ríos en 36%.
Una de las motivaciones de los investigadores al comenzar la investigación fue conocer el efecto del impacto de las presas. Así lo explica Francis Magilligan, quien es profesor de Geografía en Dartmouth y participó en el estudio. “Solo en los EE.UU. hay más de 90,000 presas listadas en el Inventario Nacional de Presas”, explica el investigador. “Una manera de pensar sobre esto es que nosotros, como nación, hemos estado construyendo en promedio una presa por día, desde la firma de la Declaración de Independencia”, ejemplifica Magilligan.
Por su parte, el hemisferio sur presenta varios ejemplos sobre la forma en que ha cambiado el uso de suelo que ha llevado al cambio en el flujo de los ríos. Entre los ejemplos notables que mencionan los investigadores están la tala en Malasia, la extracción de oro aluvial en Sudamérica y el África subsahariana, la extracción de arena en Bangladesh y la India, así como las plantaciones de aceite de palma en gran parte de Oceanía.
En investigaciones previas, Dethier ya había encontrado que la minería artesanal de oro en el Perú está asociada con el incremento en los niveles de sedimentos suspendidos.
Los cambios en la dinámica de ríos y océanos a causa de las actividades humanas tendrán efecto en las poblaciones aledañas. “En el caso de los países de baja altitud (países que viven cerca o por debajo del nivel del mar) en regiones de delta, el suministro de sedimentos de los ríos en el pasado ayudó a compensar los efectos del aumento del nivel del mar debido al cambio climático… pero ahora tienes dos [agentes] conductores[:] la disminución de sedimentos de la construcción de presas y el aumento del nivel del mar”, explica Magilligan. “Esto es particularmente preocupante en lugares densamente poblados como Vietnam, donde el suministro de sedimentos se ha reducido significativamente por la actividad de presas a lo largo del río Mekong”, complementa.
Los investigadores señalan que conocer los impactos de las actividades humanas ayudará a tomar mejores decisiones sobre el uso que damos a ríos y terrenos cercanos a ellos.
“En muchos casos en todo el mundo, hemos construido nuestro medio ambiente alrededor de los ríos y la forma en que operan, para su uso en la agricultura, la industria, la recreación y el turismo, y el transporte, pero cuando la actividad humana interrumpe repentinamente la forma en que los ríos funcionan, puede ser difícil adaptarse en tiempo real a tales impactos”, alerta Dethier.