La temporada de tormentas solares está cerca Copiar al portapapeles

Ese momento en que el Sol llega a su punto máximo

El Sol mantiene ciclos de 11 años. En 2014 ocurrió el último “máximo solar”. Se llama así a su momento de mmayor actividad.

Una imagen capturada por la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio estadounidense (NASA) el viernes 17 de febrero de este 2023 sirve como recordatorio de que la actividad de nuestra estrella comienza a intensificarse. 

Desde la nave espacial Observatorio de la Dinámica Solar se capturó la luz ultravioleta. En la fotografía se observa una llamarada solar en el borde superior izquierdo del disco solar.

Las llamaradas solares se clasifican con letras de la A a la X, donde las primeras son de menor intensidad. Por su parte, las X son las más intensas y a esta categoría pertenece la que se observó hace unos días.

En 2003 se registró la llamarada más intensa que se conoce. Fue al menos 100 veces más poderosa que la del 17 de febrero. No es el evento de mayor magnitud que se conoce pero nos recuerda que estamos a un par de años del momento más intenso de actividad solar.

Durante el ciclo solar hay cambios en las zonas oscuras de su superficie, también conocidas como manchas solares. Hacia el máximo solar aparecen más de ellas. De ellas surgen las erupciones solares. Mientras más grande es la mancha la explosión que surge de ella es más potente.

Durante este ciclo solar se reconocen más manchas solares de las esperadas. Instituciones como el Centro de Predicción del Clima Espacial de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica habían hecho pronósticos más modestos. Podemos esperar una temporada especialmente activa.

El máximo solar y sus efectos en la Tierra

Para 2025 el Sol pasará por el momento más volátil de su actividad magnética. Esta actividad tiene 3 formas de exhibirse: llamaradas solares, ejecuciones de masa coronal y tormentas de radiación. 

Los efectos de estos eventos en la Tierra son cada vez mayores. En 1989 algunas redes eléctricas fueron afectadas por erupciones solares. Los aparatos electrónicos son vulnerables ante las descargas magnéticas del Sol.

A diferencia de las décadas pasadas, nuestra tecnología depende cada vez más de dispositivos que viajan en el espacio. En 1989 había apenas 500 satélites en órbita, para 2022 había 5 mil 700. Actividades básicas en nuestra vida cotidiana como las telecomunicaciones dependen de ellos.

Una actividad que se ve particularmente afectada es la exploración espacial. Para 2025 se tiene programada la misión Artemis III que tiene el objetivo de llevar astronautas nuevamente a la superficie lunar. Los encargados de realizarla deberán ser cuidadosos.

En los próximos años podemos esperar más actividad humana en el espacio. Con cada vez más presencia de satélites en órbita, el riesgo de daños por la actividad solar aumenta. Para el periodo entre 2028 y 2029 se espera una gran erupción que alcanzaría la Tierra. Para quienes habitamos la superficie no existen riesgos; sin embargo, para los satélites que nos brindan todo tipo de servicios, sí.

Fuente

Hold onto your satellites: The sun is about to get a lot stormier