La contaminación en las grandes urbes. Copiar al portapapeles
POR: Alejandra Almed
28 mayo, 2019
La OMS se encarga de coordinar y dirigir asuntos de sanidad internacional en el sistema de las Naciones Unidas. El 15 de marzo de 2016 la OMS anunció en un comunicado de prensa que cada año mueren más de 12 millones de personas a causa de factores ambientales.
15 DE MARZO DE 2016 | GINEBRA – Se estima que en 2012 perdieron la vida 12,6 millones de personas por vivir o trabajar en ambientes poco saludables: casi una cuarta parte del total mundial de muertes, según nuevas estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Los factores de riesgo ambientales, como la contaminación del aire, el agua y el suelo, la exposición a los productos químicos, el cambio climático y la radiación ultravioleta, contribuyen a más de 100 enfermedades o traumatismos.
Contaminación del aire
Según la OMS, un nivel saludable en la calidad del aire debe tener una concentración de partículas no mayor a 25 microgramos por metro cúbico de media en 24 horas. Las partículas que forman la contaminación pueden ser partículas sólidas o gotas líquidas. Las partículas se dividen en dos grandes grupos, las más grandes se les llama PM10 y a las más chicas PM2.5 (partículas de 2.5 micrómetros de tamaño). Las normas se aplican en todo el mundo y se basan en la evaluación, realizada por expertos, de pruebas científicas referentes a: partículas (PM), ozono (O3), dióxido de nitrógeno (NO2) y dióxido de azufre (SO2).
Según las directrices establecidas en 2005 por la OMS estos son los valores limites fijados para una buena calidad del aire.
PM2.5
10 ?g/m3 de media anual
25 ?g/m3 de media en 24h
PM10
20 ?g/m3 de media anual
50 ?g/m3 de media en 24h
De acuerdo a los estudios, las partículas más nocivas para la salud son las de 10 micrones de diámetro o menos (? PM10), que pueden penetrar y alojarse en el interior profundo de los pulmones. Cuando se expone demasiado a estas partículas se corre el riesgo de desarrollar cardiopatías y neumpoatias, así como cáncer de pulmón. Es por esto que las concentraciones de partículas deben ser lo más bajas posibles.
La gran mayoría de las poblaciones urbanas sufren una exposición media anual a partículas PM10 que supera el nivel máximo de 20 µg/m3 recomendado en las directrices sobre calidad del aire. En promedio, solo unas pocas ciudades respetan actualmente los valores de referencia de la OMS.
En las regiones de la OMS, tanto en los países desarrollados como en los países en desarrollo, los factores que más contribuyen a la contaminación atmosférica urbana son el transporte motorizado, los pequeños fabricantes y otras industrias, la quema de biomasa y carbón para cocinar o como medio de calefacción, y las centrales eléctricas que usan carbón. La quema de madera y carbón para calentar las viviendas contribuye en gran medida a la contaminación del aire, sobre todo en las zonas rurales en los meses más fríos.[1]
Las cosas se ponen muy mal cuando los niveles sobrepasan los límites establecidos, en cuyos casos hay un empeoramiento significativo de enfermedades y mortalidad prematura, sobre todo en personas con enfermedades cardiopulmonares. El aumento de la mortalidad que según las estimaciones puede atribuirse a la contaminación del aire urbano se explica por los recientes aumentos de la concentración de contaminantes en la atmósfera y del tamaño de las poblaciones urbanas.
En el 2012, a nivel mundial, murieron 3.7 millones de personas por la contaminación del aire. Alrededor del 88% de estas muertes se producen en países de bajos y medianos ingresos que representan el 82% de la población mundial. Esta cifra se compara con los 1.34 millones de muertes prematuras que hubo en el 2008.
Tasa de mortalidad por factores ambientales en las distintas regiones de la OMS
A nivel regional, el informe señala, que los países de ingresos bajos y medios de la OMS de Asia Sudoriental y el Pacífico Occidental tuvieron el mayor número de enfermedades relacionadas con el ambiente en el 2012, alcanzando un total de 7.3 millones de muertes. La mayoría atribuibles a la contaminación del aire interior y exterior. Otras estadísticas regionales que figuran en el informe incluyen:
- 3.8 millones de muertes anuales en la Región de Asia Sudoriental
- 3.5 millones de muertes anuales en la Región del Pacífico Occidental
- 2.2 millones de muertes anuales en la Región de África
- 1.4 millones de muertes anuales en la Región de Europa
- 854 000 muertes anuales en la Región del Mediterráneo Oriental
- 847 000 muertes anuales en la Región de las Américas.
La OMS recomienda y alienta a los países a adoptar las medidas necesarias para reducir estos contaminantes. La institución incita a los estados a mejorar el acceso de agua potable, el uso de tecnologías y combustibles limpios para las fábricas, las calefacciones y la iluminación; también hace un llamado urgente para que las grandes urbes solucionen los problemas de tránsito, cuenten con construcciones de viviendas más eficientes en cuanto al uso energético, y fomenten la actividad física.
El boletín de prensa publicado por la Organización Mundial de la Salud, menciona a Brasil como uno de los países que ha invertido considerablemente en la modernización de barrios marginales, el reciclaje de desechos y en un sistema popular de «transporte en autobús rápido» integrado con los espacios verdes y los carriles peatonales para alentar los desplazamientos a pie y en bicicleta. A pesar de que la población se ha multiplicado por cinco en los últimos 50 años, los niveles de contaminación atmosférica son inferiores si se comparan con los de otras ciudades de crecimiento rápido y la esperanza de vida es dos años superior a la de la media nacional[2]. ¡Bravo Brasil!
La actual crisis ambiental que vive la Ciudad de México debe servir como una llamada de atención para tomar en cuenta que nuestras actividades diarias están afectando al planeta, y por consiguiente afectando nuestra salud.
No podemos dejar de lado que cada año mueren millones de personas a causa de este problema y que es responsabilidad de todos tener una mejor educación ambiental. Por ejemplo, dejar de utilizar el carro si no es necesario, así como tener conciencia sobre la quema de carbón que realizamos de vez en vez para nuestro asadito con la familia. Recuerda que la salud es lo primero y que nuestro hogar es la Tierra, y que la mejor forma de cuidarnos es cuidando al Planeta.