Las “islas mágicas” de Titán podrían ser icebergs de hidrocarburos alveolados
5 enero, 2024
En 2014 la comunidad científica quedó sorprendida por un fenómeno que observó la sonda Cassini Huygens. Sobre la superficie de Titán, la mayor de las lunas saturninas, apareció algo que recibió el nombre de “isla mágica”.
En estudios previos se había propuesto que se trataba de burbujas de gas, efectos de las olas o islas reales. Un estudio publicado recientemente propone que se trata de material sólido.
Un cuerpo que desaparece “mágicamente”
La atmósfera de Titán es densa y en ella hay moléculas orgánicas que pueden agruparse, congelarse y caer sobre la superficie. Es un mundo completamente diferente al nuestro. Sus ríos y lagos líquidos están hechos de metano y etano, en ellos las olas alcanzan apenas unos centímetros de alto.
La atmósfera de Titán es 50% más delgada que la de la Tierra. Visualmente es naranja y brumosa. Químicamente, es rica en metano y otras moléculas orgánicas o basadas en carbono.
En la superficie de esta luna saturnina existen dunas oscuras de materia orgánica. También se encuentran mares de metano y etano líquidos. En estos últimos hay cuerpos que aparecen en las imágenes de radar como puntos brillantes y pueden durar algunas horas o semanas, es lo que se conoce como “islas mágicas”.
El estudio publicado recientemente por la revista científica Geophysical Research Letters (AGU) buscó una relación medioambiental que las explicara. En esta investigación se relaciona la atmósfera de Titán, sus lagos líquidos y los materiales sólidos depositados en la superficie.
“Quería investigar si las islas mágicas podrían ser materiales orgánicos flotando en la superficie, como piedra pómez que puede flotar en el agua aquí en la Tierra antes de hundirse finalmente”, explica en un comunicado Xinting Yu.
Yu dirigió aparece como primer firmante del artículo publicado por AGU. Él es científico planetario y trabaja en el Departamento de Física y Astronomía de la Universidad de Texas en San Antonio.
A Yu y su equipo les interesaba lo que ocurría con las moléculas orgánicas que se agrupan en la atmósfera. Partieron de la duda de si al caer en los lagos de hidrocarburos flotarían o se hundirían.
Los lagos de Titán están saturados con partículas orgánicas. Los investigadores determinaron que los sólidos que caen en ellos no podrían disolverse al llegar al líquido.
“Para que veamos las islas mágicas, no pueden flotar por un segundo y luego hundirse”, señala Yu. “Tienen que flotar por algún tiempo, pero no para siempre, tampoco”, agrega.
Tanto el metano como el etano de los lagos de Titán tienen una tensión superficial baja, lo que complica que los sólidos floten. Esta tensión superficial baja, combinada con la gran densidad de los sólidos congelados reduce las posibilidades para que existan las “islas mágicas”.
La solución que encontraron fue que los grupos de moléculas fueran porosos, como un queso suizo. Si los cúmulos eran suficientemente grandes y tenían una proporción correcta de agujeros y tubos estrechos, el metano podría filtrarse. Este proceso sería suficientemente lento como para mantenerlos en la superficie.
El modelo que crearon los investigadores sugiere que los grupos de moléculas son muy pequeños para flotar por sí mismos. Sin embargo, es posible que muchos de ellos se acumulen cerca de la costa para formar piezas grandes y floten hacia adentro, como lo hacen los icebergs en la Tierra.
Para que sean observables, como ocurrió con Cassini, tendrían que combinar un gran tamaño y la porosidad adecuada. Además, otro misterio de Titán podría resolverse con este estudio. Se trata de la fina capa de sólidos congelados que cubre los cuerpos líquidos y explicaría por qué son suaves.