El cambio climático podría agravar las enfermedades cerebrales Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
16 mayo, 2024
Un grupo de investigadores del University College of London (UCL) sospechan que el cambio climático tiene efectos negativos en la salud de las personas con enfermedades cerebrales. Esto sería a partir de sus efectos en los patrones climáticos y los eventos meteorológicos adversos.
Un artículo publicado en The Lancet Neurology señala que es importante comprender el impacto del cambio climático en los pacientes con enfermedades cerebrales. Esto permitiría mantener su salud y prevenir que se agraven las desigualdades.
Enfermedades cerebrales ante climas extremos
El equipo fue dirigido por el profesor Sanjay Sisodiya del Instituto de Neurología Queen Square del UCL. En conjunto revisaron 332 artículos científicos publicados entre 1968 y 2023 alrededor del mundo.
Los investigadores tomaron en cuenta 19 condiciones diferentes del sistema nervioso. Para la selección se basaron en el estudio Global Burden of Disease 2016. Entre los padecimientos se incluyeron el accidente cerebrovascular, Alzheimer, meningitis, epilepsia y esclerosis múltiple.
También se tomaron en cuenta desórdenes psiquiátricos comunes y severos, así como el impacto del cambio climático en ellos. Entre ellos están ansiedad, depresión y esquizofrenia.
“Hay evidencia clara de un impacto del clima en algunas condiciones cerebrales, especialmente accidente cerebrovascular e infecciones del sistema nervioso”, señala en un comunicado el profesor Sisodiya. Él también es director de la Sociedad de Genómica y Epilepsia, además es miembro fundador de Epilepsia y Cambio Climático.
Sisodiya menciona que las temperaturas extremas afectan las enfermedades cerebrales, tanto las muy bajas como las muy altas. También lo hacen las variaciones significativas durante el día en periodos estacionales fuera de lo común.
Un detalle que resalta el especialista es la temperatura nocturna. Las temperaturas muy altas pueden interrumpir el sueño y se sabe que un sueño deficiente agrava las condiciones en distintas enfermedades cerebrales.
Un hallazgo de los investigadores es que ante olas de calor y ambientes más cálidos tienen un efecto marcado en los accidentes cerebrovasculares. Aumenta el número de admisiones, discapacidades y la mortalidad.
La demencia es otra enfermedad donde se reconocen claramente los efectos. Los pacientes son susceptibles a daños por temperaturas extremas como enfermedades relacionadas con el calor o hipotermia en el otro extremo.
También son vulnerables a los eventos climáticos como inundaciones o incendios. El deterioro cognitivo propio de la demencia limita su capacidad de adaptarse a los cambios ambientales.
“Esta susceptibilidad se ve agravada por la fragilidad, la multimorbilidad y los medicamentos psicotrópicos. En consecuencia, una mayor variación de la temperatura, días más calurosos y olas de calor conducen a un aumento de los ingresos hospitalarios asociados a la demencia y la mortalidad”, señalan los investigadores.
Los resultados muestran algunas correlaciones. La incidencia y admisiones hospitalarias, así como el riesgo de mortalidad para varias enfermedades cerebrales se asocian con el incremento en la temperatura ambiental, las fluctuaciones diarias en la temperatura o temperaturas extremas.
Los investigadores notaron que algunos factores ambientales no eran significativos en los primeros estudios que consultaron. Sin embargo, conforme se incrementan las condiciones climáticas extremas las poblaciones se ven cada vez más expuestas y ganan relevancia.
Como conclusión, los investigadores señalan la necesidad de comenzar a actuar inmediatamente. Ahora se puede agregar el concepto de “ansiedad climática”, que funciona como influencia adicional en muchas enfermedades cerebrales.