Minería de asteroides: ¿fiebre del oro en el espacio? Copiar al portapapeles
POR: Alejandra Almed
11 enero, 2017
Por: Antonio Medina
Imagina que hace 20 años alguien te hubiera dicho que el ser humano cazaría asteroides con el único propósito de minarlos y explotarlos en un futuro cercano. Seguramente hubiéramos tirado de loco a aquella persona que se hubiera atrevido siquiera a pensar que eso podría ser algo real.
Pero como suele pasar, la realidad siempre supera a la ficción y es que ya desde hace algún tiempo, Estados Unidos ha legislado la minería espacial.
El gobierno norteamericano aprobó la exploración espacial privada y en el último asterisco de esta “ley del espacio”, también permitió que compañías privadas se apropiaran de asteroides y otros cuerpos celestes para su explotación. Ahora Luxemburgo se suma a esta llamada “fiebre del oro espacial”.
Así es, Luxemburgo, un país europeo con dimensiones menores a las del estado de Tlaxcala, es el primer país de la Unión Europea que ha legislado la explotación de recursos espaciales.
El gobierno de este país, invertirá un total de 25 millones de euros en una compañía de minería espacial que buscará ser la primera compañía privada en poseer y explotar recursos obtenidos allá afuera.
La principal misión es la de enviar una nave en búsqueda de un determinado asteroide con las características específicas que busque la compañía. Esta nave tendría la capacidad de capturar al asteroide por medio de redes, y traerlo de regreso a la órbita terrestre, donde el proceso de explotación se llevaría acabo.
La minería espacial podría representar un negocio trillonario y es que basta pensar en la cantidad de cuerpos celestes que se encuentran orbitando la Tierra, eso sin mencionar el cinturón de asteroides, donde se calcula que existen varios millones de asteroides. Para dimensionar un poco, piensa que tan sólo un asteroide de 500 metros cúbicos podría contener todo el platino que se ha obtenido de minas terrestres en toda la historia, algo que tendría un precio de cientos de miles de millones de dólares.
Las posibilidades de explotación de estos cuerpos son muchísimas; y pueden ir desde la extracción de cantidades inimaginables de metales preciosos, pasando por la obtención de minerales que no se encuentran comúnmente en la Tierra y hasta ser utilizados para impulsar asentamientos humanos en la Luna o Marte como bases de reabastecimiento de insumos.
Y aún no hemos mencionado la otra posibilidad de explotación y es que muchos asteroides tienen grandes cantidades de agua, un elemento que empieza a escasear en nuestro planeta y que en un futuro será tan o más preciado como el petróleo mismo.
Aún quedan muchas cuestiones por resolver para que la minería espacial comience a funcionar, pero sin duda alguna en un futuro cercano será una realidad.
Ahora sólo queda resolver toda la polémica que esta practica levantará, pues el Tratado Internacional del Espacio Exterior prohíbe la posesión de cuerpos celestes y también será muy polémico saber si los recursos y beneficios obtenidos de estos recursos espaciales deberán ser para beneficios de algunos cuantos o de toda la humanidad.