La NASA planea la primera caminata espacial con puras mujeres el 29 de marzo Copiar al portapapeles
POR: Alejandra Almed
3 enero, 2019
Por: Deyanira Almazán
El próximo 29 de marzo, si todo sale como está programado, las astronautas Anne McClain y Christina Koch saldrán rumbo a la Estación Espacial Internacional para realizar trabajos fuera de la estación, lo que marca la primera vez en la historia en que una tripulación formada exclusivamente por mujeres realiza esta hazaña.
Pero no solo serán ellas las que participen en esta misión. Desde Tierra, Mary Lawrence, directora de vuelo, y Kristen Facciol, del equipo de control, apoyarán a McClain y Koch en todo momento desde el Centro Espacial Johnson, en Houston. Este hecho marcará la primera vez que se realiza una caminata espacial sin la presencia o ayuda de un astronauta de sexo masculino.
A pesar de ser un hito que sucede en el marco del Día de la Mujer, la portavoz de la NASA, Stephanie Schierholz, aseguró que no había sido planeado para que coincidiera con este mes y reiteró que los horarios y algunos otros planes siempre pueden cambiar.
Una caminata espacial, también conocida como "actividad extravehicular" (EVA), es un término amplio que se aplica a cualquier momento en que un astronauta sale de un vehículo mientras está en el espacio. Según la NASA, los astronautas realizan caminatas espaciales por varias razones: realizar experimentos en el espacio, probar nuevos equipos o reparar satélites y naves espaciales. Aún no está claro qué tareas realizarán McClain y Koch durante su caminata espacial, que se espera que dure alrededor de siete horas.
La primera caminata espacial fue realizada por Alexei Leonov en marzo de 1965, y la primera mujer que lo hizo fue la cosmonauta rusa Svetlana Savitskaya, quien realizó experimentos de soldadura fuera de la estación espacial Salyut 7 el 25 de julio de 1984. Aunque las mujeres representan un porcentaje cada vez mayor de astronautas de la NASA, sigue siendo un porcentaje mejor. La mayoría de los viajes espaciales son realizados por cosmonautas hombres, con la ayuda de algunas mujeres tripulantes.
Aún falta mucho por hacer, pero vamos por buen camino.