Nueva técnica logra repoblar arrecifes de coral a través del sonido Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
3 diciembre, 2019
En las últimas décadas los arrecifes de coral se han degradado debido a la acción humana. Esto trae consecuencias como el empobrecimiento de su biodiversidad. Un grupo de científicos australianos y británicos decidió probar un nuevo método para revitalizar arrecifes de coral. Su propuesta consiste en enriquecimiento acústico y se publicó recientemente en la revista científica Nature Communications. Partieron de una idea simple: si el sonido es saludable, los peces vendrán.
¿Cómo atraer a públicos jóvenes con sonidos?
Los arrecifes con alto grado de degradación huelen y suenan poco atractivos para los posibles pobladores. Así como los barrios con basura en las calles y altos niveles de delincuencia alejan a las personas que podrían vivir ahí, los rastros de degradación marina propician que los arrecifes de coral estén cada vez más despoblados.
El director del equipo de investigación fue Timothy A. C. Gordon, de la Universidad de Exeter y el Instituto Australiano de Ciencias Marinas. Realizaron un estudio de campo de 6 semanas. Trabajaron sobre la Gran Barrera de Coral, en Australia, la cual mostraba un deterioro avanzado.
Se colocaron altavoces de gran potencia en un segmento del arrecife. Se comparó el comportamiento con otros espacios donde no hubo intervención sonora. Durante el tiempo que se realizó el experimento se reprodujeron sonidos de un arrecife de coral sano; se tomó como referencia arrecifes con más habitantes, con sonidos de seres vivos interactuando entre sí.
En los segmentos intervenidos comenzaron a llegar peces jóvenes. Además de presentarse mostraron preferencia por establecerse ahí. En comparación con los espacios en que no se reprodujo sonido la población creció. La población de peces es un paso importante para reactivar la vida de los arrecifes de coral. Con ellos comienza un proceso de restauración para estos hábitats.
“Los arrecifes de coral sanos son lugares notablemente ruidosos –el crujir de un camarón al romperse y los alaridos y gruñidos de los peces combinados para formar un paisaje sonoro deslumbrante. El sonido hogareño para los peces jóvenes influye cuando están buscando un lugar para establecerse”, comentó Steven Simpson, de la Universidad de Exeter, coautor del artículo.
Los resultados del experimento son alentadores. Según parece, el sonido de la vida atrae más vida. El número de peces que llegaron a las zonas donde se instalaron los altavoces duplicó la población previa. Este crecimiento no se límitó al número. Después del periodo de experimentación aumentó 50% el número de especies. En apenas 6 semanas el arrecife mostró una mejoría significativa.
Aunque el elemento destacado fueron los peces, la diversidad de especies fue grande. A la Gran Barrera de Coral, al menos en los bloques con instalación de altavoces, llegaron distintos tipos de habitantes nuevos. Entre ellos hay herbívoros, detritívoros (también conocidos como descomponedores), planctívoros y depredadores piscívoros. Cada grupo aporta algo al arrecie y con esto participa en el proceso de reconstrucción.
No todo está ganado en la batalla contra el deterioro pero se tiene un resultado alentador. Los arrecifes de coral dependen de muchas otras variables como el cambio climático o la contaminación en el agua. Sin embargo, el que su biodiversidad aumente ya es un signo de mejora. Los altavoces con sonidos agradables para los peces serán una herramienta útil para restaurar estos entornos marinos, si logramos controlar nuestra participación en los otros factores que promueven el deterioro.