Cuarentena por coronavirus: un respiro para el planeta Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
18 marzo, 2020
Ante la amenaza de contagio por Covid-19 se han tomado medidas fuera de lo común alrededor del mundo. Los países más afectados como China e Italia han detenido muchas de sus actividades y esto está teniendo un impacto positivo sobre el medio ambiente. Tras la cuarentena de 11 millones de personas en Wuhan y posteriormente 60 millones de personas en toda la provincia de Hubei, los registros de gases de efecto invernadero han reducido drásticamente, así lo muestran los monitoreos satelitales de las agencias espaciales NASA (estadounidense) y ESA (europea).
Una pandemia viral pero un respiro para el planeta
El Covid-19 pertenece a la familia de los coronavirus. Estos afectan en seres humanos a las vías respiratorias. Hasta ahora lleva más de 180 mil casos alrededor del mundo, de entre los cuales se cuentan 7,100 muertes. El nivel al que se ha propagado llevó a que se le declare pandemia. Para combatirlo se han establecido cuarentenas en las zonas más afectadas.
El virus surgió en China y ahí comenzaron las medidas de control para contener la propagación del virus. De acuerdo con Lauri Myllyvirta, analista del Centro de Investigación en Energía y Aire Limpio en Finlandia, las emisiones de dióxido se redujeron en 25% durante 4 semanas a partir del final de enero. La reducción varió entre distintos sectores económicos; por ejemplo, las plantas de energía consumieron 36% menos carbón y distintas industrias redujeron su emisión de gases contaminantes entre 15% y 40%.
Las observaciones satelitales también han mostrado cambios drásticos. En un comparativo entre dos periodos, el primero del 1 al 20 de febrero y el segundo del 10 al 25 de febrero, se nota una reducción significativa en los niveles de nitrógeno sobre China. Mientras en enero había una nube de nitrógeno sobre territorio chino, para febrero parecía haberse evaporado. Las emisiones de este gas se asocian con automóviles, plantas de energía e instalaciones industriales.
Para Italia, el segundo país más afectado, la situación fue similar. Los datos del satélite Sentinel-5P de la ESA, entre enero 1 y marzo 12, muestran una disminución drástica en los niveles de dióxido de nitrógeno. La zona donde se nota un mayor cambio es el norte italiano, dónde comenzó la cuarentena. En los últimos años Italia ha buscado reducir sus niveles de dióxido de nitrógeno pero este periodo de encierro ha mostrado que se puede reducir mucho más. Tan sólo en Milán el 70% de emisiones de este gas provienen de la industria del transporte, de acuerdo con un estudio realizado recientemente por el Centro Europeo de la Comisión de Investigación Conjunta. Si la gente deja de transportarse las emisiones se reducirían y los satélites ya lo han confirmado.
Algunos ven a este fenómeno como un ejemplo esperanzador para combatir las emisiones de gases de efecto invernadero. Entre ellos está Jacqueline Klopp, subdirectora del Centro para el Desarrollo Urbano Sustentable de la Universidad de Columbia, en Nueva York. "La gente se está quedando en casa y realmente detiene muchas de las actividades que emiten gases de efecto invernadero y otros contaminantes", afirmó Klopp.
No todos los especialistas comparten esta visión optimista. Si bien, la cuarentena ha mostrado un cambio rápido al reducir las emisiones contaminantes, este será pasajero. Si bien, sirve como un ejemplo de que realmente es posible reducir nuestro impacto negativo en el planeta, no garantiza continuidad. Una vez que pase la contingencia sanitaria los gobiernos a nivel mundial tendrán la oportunidad de tomar esta experiencia contra el cambio climático y tomar acciones, la pregunta es si realmente lo harán o volveremos a la misma dinámica contaminante de los meses previos.