OSIRIS-REx ya está en camino de regreso a la Tierra Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
11 mayo, 2021
A las 4:23 pm hora del este (equivalente a las 3:23 pm del centro de México) del lunes 10 de mayo de 2021 OSIRIS-REx comenzó su regreso a la Tierra. La maniobra fue la segunda más importante desde diciembre de 2018 cuando el vehículo espacial llegó al asteroide Bennu. Ahora viaja con cerca de 60 gramos de muestras del suelo del asteroide y se espera su regreso para septiembre de 2023.
Un regreso a casa, ¿con escalas?
El NASA Orígenes, Interpretación Espectral, Identificación de Recursos, Explorador de Regolito, mejor conocido por sus siglas en inglés: OSIRIS-REx, trae consigo una cápsula que tiene como destino el desierto de Utah. La misión superó las expectativas iniciales y fue capaz de recolectar más de 2 onzas, equivalentes a 60 gramos, del suelo de Bennu.
El viaje de esta misión espacial cuenta ya casi 5 años y aún podría extenderse otros 4, incluso más. Su misión principal consistía en recolectar muestras del asteroide, ahora que lo ha conseguido encendió sus motores y redireccionó su camino. En este momento orbita al Sol y pasará dentro de la órbita de Venus. Dará dos vueltas alrededor de nuestra estrella y su regreso a la Tierra está programado para el 24 de septiembre de 2023.
Una vez que esté cerca de la Tierra, OSIRIS-REx dejará caer la cápsula con muestras de Bennu. Ya dentro de la órbita terrestre, la cápsula desplegará un paracaídas para amortiguar la caída. El blanco a donde apuntará es la Extensión de Prueba y Entrenamiento de Utah, en el oeste de Estados Unidos.
Entregar el paquete con muestras será la siguiente maniobra complicada para el equipo de operación de OSIRIS-REx. Las últimas instrucciones para el ingreso de la cápsula con muestras en la Tierra se darán unas semanas antes del reingreso. Se consideran dos errores posibles que es indispensable evitar. El primero ocurriría si se lanzara desde una altura muy baja, la cápsula podría rebotar como una piedra que se avienta hacia un lago. Por otro lado, si se lanza desde muy arriba la cápsula correría el riesgo de quemarse en la atmósfera.
OSIRIS-REx es una misión que se ha enfrentado a distintos retos. Originalmente se había planeado tomar muestras en alguna planicie de Bennu. La superficie del asteroide no se conoció hasta que el dispositivo espacial ya estaba ahí. Los espacios desde donde se podía tomar muestras fueron más pequeños de lo que se imaginaba y fue necesario hacer un plan de navegación más preciso.
La experiencia de investigación de OSIRIS-REx permitió comprender mejor algunos detalles y afinar otros sobre el asteroide Bennu. Por ejemplo, se confirmó la composición mineral que incluía señales de agua antigua, así como una rica presencia de carbón. Por otro lado, se refutó la creencia de que el asteroide tendría una superficie lisa.
Una vez que las muestras estén en la Tierra, la comunidad científica tendrá material para estudiar con más detalle al asteroide Bennu. Si la operación de ingreso de la cápsula con muestras tuviera alguna complicación en 2023 se tiene un plan B; la nave desviaría su trayectoria para volver a intentar el ingreso de la cápsula en 2025.
Este tipo de operaciones ya se han hecho antes. Hace unos meses la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA) recuperó las muestras que Hayabusa 2 trajo del asteroide Ryugu. El destino de OSIRIS-REx podría ser similar al de la misión Japonesa, que ahora viaja hacia otro objetivo. Ya se evalúa la posibilidad de extender la misión y buscar un siguiente objetivo. Ya se han hecho ajustes en distintos momentos de la misión, por ahora la noticia confirmada por la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio estadounidense (NASA), es que la visita a Bennu terminó y OSIRIS-REx viaja de vuelta a la Tierra.