El satélite climático GOES-T despegó exitosamente Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
3 marzo, 2022
La programación del lanzamiento se hizo a las 4:38 pm del martes 1° de marzo con una ventana de oportunidad de dos horas. El cohete Atlas V que lo llevó al espacio salió de Cabo Cañaveral a la hora prevista.
El Satélite Geoestacionario de Operación Ambiental (GOES, por sus siglas en inglés) pronto se unirá a sus predecesores GOES-16 y GOES-17. Una vez en órbita pasará a llamarse GOES-18.
Este nuevo dispositivo observará la costa oeste de Estados Unidos, Alaska, México, Centroamérica, Hawaii y el Océano Pacífico.
Un satélite con instrumentos afinados
GOES-T pertenece a la serie GOES-R (el nombre original de GOES-16). Es el tercero de ella y cuenta con algunas mejoras. Cuando esté en funciones reemplazará a GOES-17 en su tarea de observar los territorios estadounidenses del oeste, así como el Pacífico.
GOES-T hará distintas mediciones. Es capaz de detectar incendios con gran precisión. Además de monitorear, es capaz de estimar su intensidad. Las nubes bajas y la neblina son otro elemento climático que observará.
También detectará con mayor anticipación la presencia de huracanes y estimará su intensidad. Monitoreará los eventos climáticos con efectos en ríos que puedan causar inundaciones y deslaves. La calidad del aire también está entre sus objetivos de observación para emitir alertas oportunas. Humo y polvo estarán bajo supervisión. Detectará erupciones volcánicas y hará monitoreo de ceniza y dióxido de azufre. Medirá la temperatura oceánica superficial para dar seguimiento a la vida marina y la pesca.
GOES-T tiene las mismas funciones que los dos modelos anteriores de la serie, con algunas mejoras. En 2018, cuando GOES-17 comenzó sus funciones, se detectaron errores en su sistema de enfriamiento. Debido a esto, se tienen pérdidas al capturar imágenes infrarrojas. El nuevo satélite cuenta con un sistema de enfriamiento más sencillo diseñado para evitar los problemas de su versión anterior.
El lanzamiento de GOES-T estuvo a cargo de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio estadounidense (NASA). Una vez que el satélite esté en órbita pasará a ser operado por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de la misma nación (NOAA). La órbita geoestacionaria del satélite se ubica a 35 mil 900 kilómetros sobre la superficie terrestre.
"El final de mi trabajo es el comienzo de la verificación y las operaciones en órbita que continuarán durante años y años. Una vez que separamos la nave espacial en su órbita correcta, hemos terminado", explica Rex Engelhardt, quien es responsable de la misión GOES-T para la NASA. Cuando el satélite esté en órbita su nombre cambiará a GOES-18. Una vez que esté calibrado y funcione correctamente recibirá el nombre de GOES-West, por la región del planeta que estudiará.
La constelación de satélites goes ofrece diferentes beneficios. Sus predicciones ayudan a conocer con mayor detalle fenómenos como huracanes, tormentas eléctricas y tornados. Otros eventos como caída de rayos a tierra, lluvias torrenciales o inundaciones también serán monitoreados y se tendrá una mejor previsión ante ellos. GOES-T ya está camino a su órbita para comenzar con esta labor.