Baobabs, los árboles más longevos de África se están muriendo Copiar al portapapeles
POR: Alejandra Almed
28 mayo, 2019
Por: Luis Moctezuma
En la película Madagascar los lémures viven sobre unos enormes árboles desde los cuáles también organizan fiestas. Los datos recabados por una investigación publicada el 11 de junio en la revista Nature Plants indican que estos gigantes están muriendo rápidamente en distintos puntos de África. Se llaman Baobab y están extendidos por una gran parte del continente, aunque quizá no por mucho tiempo.
¿Qué hace especiales a los Baobabs?
Su forma peculiar es fácil de asociar con paisajes africanos. Sus ramas se acumulan en la parte de arriba a diferencia de otros árboles, lo que para algunos les da una forma parecida a las raíces y hace pensar que se plantaron al revés. Producen flores que después se convierten en frutos, por esto pertenecen a la familia de las angiospermas y son sus representantes más grandes y longevos.
En algunas partes de África se les considera sagrados. Hay restricciones para quienes se acercan a ellos, por ejemplo, no se permite maldecir cerca de ellos. Sus frutos no están destinados a cualquiera tampoco, sólo quienes son considerados sabios pueden tomarlos, al igual que sus hojas.
Esa forma tan peculiar que tienen de crecer hace que la forma de medir su edad sea distinta a otros árboles. Para conocer la edad de otras especies basta con contar sus anillos. Sin embargo, los baobabs crecen de una forma distinta, con el paso del tiempo distintos tallos se van fusionando para formar otros cada vez más grande. A menudo aparecen zonas huecas como resultado de esas uniones.
Para medir la edad de estos árboles se recurrió a la medición por carbono. Así fue como el equipo de investigadores dirigidos por Adrian Patrut registró las edades sobre algunos de los baobabs más antiguos de África. Esto comenzó en 2005 y en la visita más reciente notaron que los más antiguos y altos estaban muriendo o perdiendo sus ramas de mayor edad.
Las pérdidas
Los baobabs alcanzan grandes edades, por ejemplo, Panke, un árbol sagrado que además es el más antiguo del continente, tiene una edad aproximada de 2,450 años. Otro de los más famosos fue Chapman, nombrado así en honor a James Chapman, explorador y cazador del siglo XIX; este árbol sólo llegó a los 1,400 años y murió en enero del 2016.
Según los registros del equipo de Patrut se han perdido muchos de los baobabs más viejos y grandes. En los últimos 12 años murieron 9 de los 13 más viejos registrados. En cuánto a los más altos también hubo pérdidas importantes: 5 de los 6 mayores. Para estos científicos que publicaron su investigación recientemente no hay explicación para esta muerte masiva de baobabs.
¿Cambio climático?
Viajando un poco más atrás, ya se había postulado una explicación para la muerte de estos árboles. En octubre de 2013 una investigación publicada en la revista Science Direct señalaba al cambio climático. En aquella ocasión el análisis se restringió a Madagascar y la identificación de los baobabs no fue directa, se recurrió a información satelital. En aquella ocasión se reconoció dos especies altamente vulnerables al cambio climático.
No es difícil imaginar que los cambios de temperatura hayan influido negativamente en la población de baobabs. La evidencia que se tiene hasta ahora es poca y la situación de Madagascar es distinta a la del resto de África. Además de esto, la diferencia en metodologías hace difícil confirmar si en efecto hay evidencias confirmables para todos los casos sobre la influencia del clima. Lo que queda es un largo camino para comprender y frenar lo que está pasando en África.