Chang’e 5 lista para alunizar Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
30 noviembre, 2020
El 24 de noviembre despegó la sonda lunar Chang’e 5. Su misión es recolectar muestras de la superficie lunar por primera vez en varias décadas. Este lunes a las 4:40 am, hora de Beijing, equivalente a las 2:40 pm del domingo en el centro de México, los módulos de esta misión se separaron. Mientras una parte de la sonda espera el momento perfecto para alunizar, la otra se mantendrá en órbita para preparar el regreso a la Tierra. Se espera que el regreso de la sonda con las muestras sea este 15 de diciembre.
Una hazaña olvidada
Las muestras lunares que se tienen han ayudado a comprender mejor la composición de nuestro satélite. Gracias a la información que se tiene de ellas es posible hacer planes sobre las futuras misiones lunares. Sin embargo, la última recolección se hizo en la década de los 70 del siglo pasado.
Únicamente dos naciones han tomado muestras de la superficie lunar, China podría convertirse en la tercera. En 1969 se hizo como parte de la misión Apolo 11. Por su parte, la Unión Soviética lo consiguió con la misión Luna 24 en 1976. Desde entonces no se ha vuelto a intentar.
La operación para el descenso está planeada para darse dentro de los próximos 3 días. La sonda se compone de un orbitador, un aterrizador, un módulo de ascenso y una cápsula de regreso. En total su peso es de 8.2 toneladas. Para lanzarla fuera de la Tierra se usó un cohete Long March 5, el más grande que tiene China hasta ahora.
El objetivo de la misión es recolectar alrededor de 2 kilogramos de muestras lunares. Únicamente los módulos de ascenso y descenso llegarán a la superficie lunar. Su descenso será suave y el muestreo se hará de forma automática. Mientras tanto, el orbitador y la cápsula de regreso mantendrán una órbita de 200 kilómetros sobre la superficie lunar.
El alunizaje será en el Oceanus Procellarum u Océano de las Tormentas, el más grande de los mares lunares en la cara visible. Una vez en la superficie las muestras serán recolectadas mediante un taladro y un brazo mecánico. La maniobra llegará hasta 2 metros de profundidad. Cuando la carga esté lista el módulo de ascenso volverá a la órbita lunar. Una vez ahí, la cápsula de regreso se dirigirá de vuelta a la Tierra.
Con las muestras de Chang’e será posible estudiar con más detalle la Luna. Las rocas y el regolito obtenido permitirán comprender mejor su edad y recursos. También será material útil para comprender mejor a nuestro sistema solar. De acuerdo a la Administración Espacial Nacional China (CNSA, por sus siglas en inglés) esta es la misión espacial china más ambiciosa hasta la fecha.
El regreso de esta misión estará vigilado por la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés). Desde distintos centros se observará el trayecto de la cápsula de regreso. Entre ellos se encuentra la estación de seguimiento de Maspalomas en Gran Canaria, territorio español en el Atlántico.
Si todo sale de acuerdo al plan, China se convertirá en la tercera nación en traer muestras de la Luna. En un par de semanas podremos confirmar si lo consiguió. De ser así, habrá material nuevo para estudiar a nuestro satélite natural. Los secretos que guarda la luna seguirán siendo muchos, pero podremos comprenderla un poco mejor.