China se prepara para explorar el “lado oscuro” de la luna Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
10 diciembre, 2018
El pasado viernes 7 de diciembre despegó la misión espacial Chang’e 4, su alunizaje está previsto para inicios de enero. Salió del Centro de Lanzamiento de Satélites de Xichang a las 6:23 de la tarde, en el Tiempo Universal Coordinado (UTC, por sus siglas en inglés). Su viaje comenzó a bordo de un cohete Larga Marcha 3B. Este viaje de exploración espacial es novedoso por diferentes razones, la primera de ellas es que será la primera vez que un dispositivo humano alunice en la cara oscura de nuestro satélite.
El nombre de esta zona lunar suele crear confusiones. La superficie de la luna recibe luz del sol en ambas caras; sin embargo, un fenómeno llamado “rotación sincrónica” provoca que desde la Tierra se vea siempre la misma cara, esto debido a que el tiempo que la luna tarda en girar sobre su eje coincide con el que requiere para girar alrededor de nuestro planeta. Esta será la primera vez que el punto de llegada sea en ese punto desconocido de nuestro satélite.
Ya antes se había explorado la cara oculta de la luna. En 1959 se obtuvieron las primeras y únicas imágenes de esta enigmática región. La sonda espacial Luna 3, de origen soviético fue la encargada de esa primera visita. Después de ella se dejó de lado la exploración de esa parte de nuestro satélite que lo mismo despierta dudas y fantasías espaciales.
Un camino largo hacia el “lado oscuro de la luna”
Chang’e-4 toma su nombre de la diosa lunar china. Es sólo una pieza en un largo proyecto de exploración espacial. Las primeras dos misiones de este proyecto tenían como objetivo obtener información de la órbita lunar. Por su parte las misiones 3 y 4 fueron diseñadas para funcionar sobre la superficie lunar. Las dos siguientes misiones que se tienen programadas buscarán traer a la Tierra rocas y muestras del suelo lunar.
Se trata de un proyecto ambicioso y planeado a largo plazo. En esta misión se realizarán algunos experimentos con miras a futuros desarrollos que tendrán por base nuestro satélite. Entre los aspectos que estudiará Chang’e 4 están las ondas de radio y la fotosíntesis en la atmósfera lunar.
Parte del cargamento que lleva consigo son 3 kilogramos de semillas. Con ellas se estudiará la forma en que las plantas reaccionan en condiciones lunares. Los cultivos que acompañan a esta misión espacial son papas y arabidopsis (una hierba que crece en Asia, el norte de África y Europa). El experimento recibe el nombre de “minibiósfera lunar” y es el resultado del trabajo conjunto de 28 universidades chinas.
La minibiósfera se encuentra en un contenedor sobre el que se harán observaciones detalladas. Entre los requisitos para que funcione exitosamente está la temperatura, que debe mantenerse entre 1 y 30 grados para que sus niveles de humedad sean adecuados. La luz del sol será dirigida por un dispositivo especial para que las plantas la reciban en las condiciones adecuadas.
Por su parte, las ondas de radio son parte de un proyecto a largo plazo para observar el universo. En este caso se realizará el experimento de origen alemán llamado LND. Además, la misión lleva a bordo un espectrómetro que hará mediciones de baja frecuencia. Desde la luna se tienen mejores condiciones para observar el espacio que sobre la superficie terrestre y es parte de lo que aprovechará esta misión espacial.
China tiene grandes planes para explotar los recursos de la luna y estamos ante su cuarto paso. Nuestro satélite ofrece grandes beneficios para quienes logren llegar a ella. La falta de aire en nuestro satélite ofrece mejores condiciones para el funcionamiento de paneles solares. Además, existen reservas importantes de otros recursos que existen en pequeñas cantidades en nuestro planeta como titanio, uranio o helio-3, un combustible potencial para obtener energía nuclear.
La carrera por la luna lleva varias décadas a pesar de haberse mantenido en hibernación por mucho tiempo. En estos últimos años se han propuesto proyectos muy ambiciosos desde distintos puntos del planeta. Mientras algunos buscan experiencias artísticas en nuestro satélite como SpaceX con su Dear Moon Proyect, otros tienen en mente el potencial comercial de nuestro satélite. Las próximas décadas nos confirmarán quienes son capaces de conseguir su objetivo.