China siembra nubes desde avión no tripulado Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
4 octubre, 2022
Desde hace años China ha experimentado exitosamente con el clima. Las historias son muchas, desde los juegos olímpicos de Beijing, hasta el último aniversario del partido político oficial, los chinos han provocado lluvias para obtener un clima favorable.
En esta ocasión se envió a un Vehículo Aéreo No Tripulado (UAV) a una región donde nacen algunos de sus ríos más importantes: la meseta de Qinghai-Tíbet. Además del logro climático, se recopilaron datos que serán útiles para la investigación.
Una operación para controlar el clima
Wing Loong-2H es un avión civil fabricado por la Corporación de la Industria de Aviación de China (AVIC). Su última misión y por la que ahora se habla de él alrededor del mundo fue su misión de siembra de nubes en Qinghai-Tíbet. De acuerdo con AVIC, el vehículo aéreo detectó exitosamente las nubes de precipitación y obtuvo de forma artificial mejores precipitaciones y nevadas en la Cordillera Aemye Ma-chhen en la región de Sanjiangyuan, parte de la meseta.
El Wing Loong-2H tenía instalado un dispositivo catalizador para mejorar la precipitación. Parte de su equipo incluía un dispositivo de detección de nubes de precipitación para recopilar datos. Entre ellos están las características y la estructura de las nubes en la meseta de Qinghai-Tíbet, así como los efectos de la operación en el aumento de las precipitaciones.
Los datos recopilados serán motivo de investigación. Con ellos se estudiará el mecanismo de precipitación de nubes en la meseta de Qinghai-Tíbet. También su relación con las tecnologías catalíticas relacionadas. Esto permitirá operaciones más efectivas en el futuro.
Las mediciones que hizo Wing Loong-2H ya produjeron algunos datos de dominio público. La misión duró alrededor de 5 horas. En ese tiempo las precipitaciones alcanzaron hasta 15 mil kilómetros cuadrados. Estos datos los proporcionó la AVIC a través del medio noticioso oficial Xinhua.
La elección del lugar fue estratégica. Sanjiangyuan, que en chino significa “la fuente de los tres ríos”, es el lugar donde se ubican las cabeceras de los ríos Yangtze, Amarillo y Langcang. La provincia de Qinghai tiene el apodo de “la torre de agua de China”. El objetivo de sembrar nubes y producir datos sobre su efecto es mantener un control sobre la mejora que estas operaciones producen. La meta, en última instancia, es aumentar las nevadas y la cobertura de hielo en áreas típicas de glaciares en la meseta.
La meseta de Qinghai-Tíbet tiene una gran importancia para China. De ella y su flujo de agua depende una parte importante de la producción agrícola del país. Controlar las precipitaciones en esta región es parte de una exploración de métodos adecuados para combatir al cambio climático.
Antes de esta operación, otro vehículo no tripulado ya había hecho observaciones para recopilar datos meteorológicos sobre la meseta de Qinghai-Tíbet. Ahora se realizó la siembra de nubes junto con recopilación de datos. El siguiente paso para la CMA es la construcción de un extenso sistema de observación meteorológica aerotransportada para la protección ecológica de la meseta. Este sistema se basarán en el uso de UAVs.
Esta operación de siembra de nubes fue una colaboración entre distintas instituciones. Participaron el Centro de Modificación del Clima de la Administración Meteorológica de China (CMA), el Centro de Observación Meteorológica de la CMA, AVIC (Chengdu) Unmanned Aerial Vehicle System Co., Ltd., entre otras.
Los planes para control meteorológico de China son ambiciosos y en las últimas décadas han mostrado resultados alentadores. Ahora es el turno de los vehículos no tripulados en el control de lluvias.