Ciudades esponja, una solución inteligente ante la crisis del agua Copiar al portapapeles
POR: Deyanira Almazán
21 febrero, 2020
No es ninguna novedad que el aumento de la población, la urbanizacion acelerada y el cambio climático están causando importantes problemas en las ciudades. Uno de los más importantes es la falta de agua. Para atacar este grave problema, en los últimos años se han propuesto nuevas e innovadoras soluciones basadas en la naturaleza (SbN) que utilizan o imitan procesos naturales para mejorar y eficientar la gestión de los recursos hídricos. Una de ellas son las ciudades esponja.
El concepto de ciudad esponja consiste en aplicar enfoques de infraestructura verde en paisajes urbajos, principalmente para mejorar la disponibilidad de agua.
Ante el aumento en la intensidad de las lluvias de los últimos años ( cuatro veces más desde 1980 según los estudios de cambio climático), las ciudades esponja pretenden cambiar la percepción de la lluvia, y en lugar de verla como potencial de desastre, verla como oportunidad para absorver y abastecer las necesidades hídricas de las urbes.
Actualmente las áreas urbanas pueden absorber solo entre el 20% y el 30%, pero las “ciudades esponja” pretenden ampliar ese porcentaje, utilizando techos verdes, pavimentos permeables, jardines verticales y edificios verdes, para emular lo que sucede en los humedales y riberas restauradas. Esto, junto con la restauración de humedales y ríos urbanos y periurbanos buscan mitigar los impactos negativos de la urbanización sobre los ecosistemas naturales.
Los jardines pluviales y los sistemas de biorretención se utilizan para recolectar la escorrentía y eliminar ciertos contaminantes. Parte de esta agua se regresa al sistema natural y se almacena para garantizar la disponibilidad de agua para fines de riego y limpieza durante los períodos de sequía.
La iniciativa de ciudades esponja surgió en China, en donde ya 250 ciudades se han transformado para cumplir con este objetivo. El país asiático se ha impuesto la meta de lograr que el 80% de sus áreas urbanas absorba y reutilice al menos el 70% del agua de lluvia para el 2030.
La iniciativa también se ha expandido a otras partes de América, Rusia e Indonesia. Sería un gran logro poderlo implementar en México, ¿no lo crees?.