¿CÓMO EL POLVO DEL SAHARA MANTIENE VERDE EL AMAZONAS? Copiar al portapapeles
POR: Antonio Medina
31 mayo, 2019
Por un lado, tenemos una de las regiones más áridas e inhóspitas del planeta y por otro, el pulmón más grande y la selva con mayor biodiversidad del mundo. Estas dos regiones no parecerían tener nada en común, pero la realidad es que comparten un pequeño detalle, que de hecho, permite que la selva amazónica sea tan densamente poblada por flora y fauna como la conocemos.
Ese pequeño detalle que comparten ambas regiones es un río, pero no uno común y corriente, este río no lleva agua y tampoco va sobre la superficie terrestre, pero quienes lo han visto desde la Estación Espacial Internacional, lo describen como un río de arena que lentamente cruza desde el norte de África, atraviesa el océano Atlántico y llega a su destino final, la selva amazónica.
Antes de que el Sahara fuera el desierto más grande del planeta (y la tercera zona árida más grande, después del Ártico y la Antártida), contaba con varios cuerpos de agua ricos en minerales, particularmente en fósforo, y es justamente este mineral el responsable de fertilizar la tierra del Amazonas. Un estudio realizado por científicos de la NASA y las universidades de Maryland y Miami, ha demostrado que anualmente, unas 182 millones de toneladas de arena realizan este viaje trasatlántico, de las cuales 22 mil toneladas son de fósforo. Una aportación trascendental para la vida en esta selva.
Por medio de los datos recopilados por el satélite CALIPSO de la NASA, los investigadores realizaron una animación en 3D que ilustra este fenómeno. Aunque no es algo nuevo para ellos, sí representa una gran oportunidad para que, aquellos que no han podido ver este fenómeno desde el espacio, tengan una idea clara del comportamiento de este río de arena, que viaja miles de kilómetros y que permite que una de las zonas más áridas del planeta fertilice a la más verde de todas.
En el Amazonas podemos encontrar el 60% de las especies conocidas en el planeta. Lo que quiere decir que millones de especies de plantas y animales, incluyendo 2,500 tipos de peces, 2,500 especies de pájaros, 3,500 tipos de árboles, además de mamíferos, reptiles e insectos, se ven gratamente beneficiados por el polvo y la tierra que les llega desde el otro lado del mundo.