¿Cómo funciona la energía del viento? Copiar al portapapeles
POR: Alejandra Almed
28 mayo, 2019
Hace algunos años el proceso económico se dio principalmente gracias a combustibles de origen fósil (petróleo y carbón), sobre todo en los países donde contaban con estos recursos en grandes cantidades y a bajos costos.
La creciente preocupación por el medio ambiente está llevando a la sociedad a buscar nuevas formas de producir energía que dañen menos el entorno y aseguren la supervivencia de nuestro planeta para generaciones futuras. Un ejemplo de energía alternativa es la eólica.
La energía eólica es la fuente de electricidad de más rápido crecimiento en el mundo. En el 2012, cerca de 45,000 megawatts (MW) de nueva capacidad se instalaron en todo el mundo.
En México se estima que existen 1,400 MW de capacidad eólica instalada. El parque eólico más grande de latinoamérica está situado en este país, en el Istmo de Tehuantepec, en un pueblo llamado La Ventosa.
¿Cómo se produce la energía eólica?
La energía eólica tiene su origen en el Sol, ya que éste es el responsable de que se produzca el viento. El viento es un efecto derivado del calentamiento desigual de la superficie de la Tierra. La atmósfera de la Tierra absorbe la radiación solar de forma irregular debido a diversos factores como la nubosidad, la orografía y los océanos; En las zonas con mayor impacto solar el aire se calienta más.
Por efecto de la radiación solar, el aire se dilata y asciende, formando bolsas de aire. En las zonas con menos radiación solar el aire asciende menos y se concentra en bolsas sometidas a altas presiones, mientras que el aire caliente queda sometido a bajas presiones en bolsas más altas.
La energía eólica tiene una serie de ventajas como el hecho de ser una energía renovable, es limpia porque no produce emisiones ni residuos contaminantes y puede instalarse en espacios no aptos para otros fines.
¿Qué es un parque eólico?
El parque eólico es una central eléctrica donde la producción de la energía eléctrica se consigue a partir de la fuerza del viento, mediante aerogeneradores que aprovechan las corrientes de aire. Para producir electricidad con una central eólica es necesario que el viento sople a una velocidad de entre 3 y 25m/s.
El viento hace girar las palas al incidir sobre ellas, convirtiendo así la energía cinética del viento en energía mecánica que se transmite al rotor. Esta energía se transmite mediante un eje de baja velocidad a la caja del multiplicador, de donde sale a una velocidad 50 veces mayor. Es entonces cuando se puede transmitir al eje del generador eléctrico para producir energía eléctrica.
En un aerogenerador se crea electricidad estática al producirse el roce del viento sobre él. Esta electricidad estática se descarga a través de una presa en el suelo que tienen todos los aerogeneradores. Esta presa en el suelo se instala porque, debido a la altura de la torre, se crea una diferencia de potencial entre el suelo y el aerogenerador.
El principal problema de los parques eólicos es la incertidumbre respecto a la disponibilidad de viento cuando se necesita. Lo que implica que la energía eólica no puede ser utilizada como fuente de energía única y debe estar respaldada siempre por otras fuentes de energía con mayor capacidad de regulación (térmicas, nucleares, hidroeléctricas, etc.).
Para aprovechar la energía eólica se utilizan los aerogeneradores.
Aerogenerador
Un aerogenerador es un generador de electricidad activado por la acción del viento. El viento mueve la hélice y a través de un sistema mecánico de engranajes hace girar el rotor de un generador, que produce la corriente eléctrica.
Actualmente existe una gran variedad de modelos de aerogeneradores que se diferencian entre ellos por su potencia, por el número de palas o incluso por la manera de producir energía eléctrica atendiendo a diferentes criterios como la posición del aerogenerador y por la rotación respecto al viento.