El CO2 podría ser un negocio rentable, afirma estudio Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
20 noviembre, 2019
La crisis climática es un problema de gran alcance. Las medidas para enfrentarla son cada vez más urgentes y un equipo de investigadores, dirigido por Ella Adlen de la Oxford Martin School, de la Universidad de Oxford, propone negocios que promuevan su reducción. Si vemos a la reducción del dióxido de carbono (CO2) menos como una obligación y comenzamos a tomarlo como una oportunidad de negocio, habrá muchos más interesados en reducir este gas de efecto invernadero. Los resultados se publicaron recientemente en la revista científica Nature.
Utilizar el CO2, una oportunidad de negocio y supervivencia climática
Recuperar el dióxido de carbono de la atmósfera tiene dos beneficios: disminuye el impacto de las emisiones de gases de efecto invernadero y al mismo tiempo disminuye costos de producción en algunos productos. Bajo esta premisa, el equipo internacional de investigadores de dio a la tarea de proponer distintas rutas posibles para convertir este gas contaminante en productos comercializables.
El artículo menciona que, si bien, existen procesos que ya se han probado antes para reducir los gases de efecto invernadero, existen otras alternativas que valdría la pena explorar. Medios como el uso de químicos, microalgas o la conversión en combustibles son una realidad; sin embargo, su potencial de reducción de CO2 es limitado. Habría otros caminos posibles para este gas contaminante, el estudio propone 10 usos distintos.
Los cálculos que se muestran en el estudio son alentadores. Al año podría recuperarse 05 gigatoneladas de CO2. Una tonelada equivale en masa a mil kilogramos, y esa media gigatonelada sería equivalente a 500 millones de toneladas. Para hacerlo más claro, el estudio propone una captación de 100,000,000,000 kilogramos de dióxido de carbono, que es una cantidad nada despreciable.
Además de un apoyo para el ambiente, esta cantidad de CO2 captado equivale a un gran ahorro para la industria. Los investigadores estiman que el costo de procesar el CO2 sería bajo, aproximadamente 100 dólares por cada tonelada. El costo sería variable en función del tipo de industria que lo utilice.
Las propuestas que aparecen en el estudio son 10:
- Productos químicos basados en CO2.
- Combustibles basados en CO2.
- Combustibles y otros productos derivados de las microalgas.
- Materiales de la construcción.
- Recuperación de aceites e hidrocarburos mediante CO2.
- Almacenamiento y captura de bioenergía basada en carbón.
- Productos para mejorar la resistencia al desgaste.
- Mejora de técnicas forestales de reforestación y administración de bosques.
- Administración de suelos por captación de carbón.
- Biocarbón.
Estas propuestas son cíclicas, tanto de uso abierto como cerrado. En el primer caso, no se trata de atrapar el CO2 que ya está en la atmósfera, sino que se capta el que una industria produce. Con esto se reduce significativamente la emisión de este gas contaminante. Para las alternativas cerradas, se recupera el CO2 almacenado en lugares como la litosfera, el océano profundo, o el que se ha mineralizado en el entorno natural. En el caso de las opciones abiertas, la base son los sistemas biológicos que se caracterizan por su gran capacidad de retención de sustancias contaminantes, lo que evita su integración a la atmósfera.
De acuerdo con el Panel Intergubernamental de de Cambio Climático el reto para este siglo es grande. Para evitar que la temperatura se eleve más de 1.5 grados celsius es necesario remover entre 100 y 1,000 gigatoneladas de dióxido de carbono. A esto hay que agregar que, en promedio se aumenta 1% el nivel de emisiones. Se trata de una tarea urgente.
El artículo publicado por Nature propone rutas para el aprovechamiento del CO2. Ese gas ya está en la atmósfera y es necesario reducir sus niveles para mantener nuestro entorno en condiciones adecuadas para la vida como la conocemos. Si la industria ve un beneficio en la recuperación de este gas, el proceso para disminuir su presencia será más rápido y las posibilidades de conservar nuestro planeta en buenas condiciones aumentan. Habrá que hacerles notar a los empresarios que se trata de un negocio rentable.