El telescopio espacial James Webb despegará después de navidad Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
23 diciembre, 2021
James Webb será el telescopio más potente en la historia, es un proyecto que lleva tres décadas y debido a las condiciones climáticas esperará un día más para despegar. Desde 1990 en que comenzó el proyecto ya ha sufrido varios retrasos en la fecha de lanzamiento. La última fecha que se había propuesto para su lanzamiento era el viernes 24 de diciembre de 2021; sin embargo, el clima en Kourou, Guayana Francesa, no es favorable. El punto de lanzamiento, cerca del ecuador ayudará a que el cohete tenga un mejor impulso y el consumo de combustible sea menor. La siguiente ventana de oportunidad es por la mañana del 25 de diciembre, entre las 9:20 y las 9:52 am hora local, que en el centro de México será de 6:20 a 6:52 am.
Un lanzamiento largamente esperado
Durante su desarrollo, el telescopio espacial James Webb ha tenido varias modificaciones respecto al proyecto original. Originalmente se había establecido a 2007 como su año de despegue, posteriormente fue 2018 y finalmente, este 2021 está empacado y listo para salir al espacio. Su destino final es el punto de Lagrange 2, un lugar en el espacio que siempre se mantiene a la misma distancia entre la Tierra y el Sol (1.5 millones de kilómetros de nuestro planeta).
Al hablar del telescopio espacial Webb aparece la referencia obligada del Hubble, el telescopio espacial que durante más de 3 décadas nos ha mostrado el universo. Existen diferencias importantes entre los dos telescopios, siendo el Webb un sucesor con mucho más capacidad para mostrarnos el universo en diferentes etapas de su historia.
Casi desde su lanzamiento el Hubble ha resistido su estancia en el espacio gracias a reparaciones. En 1993 recibió la primera misión de servicio (SM1), que hizo algunos ajustes para mejorar su funcionamiento. Esto es algo impensable en el James Webb. Si algo falla, la misión se habrá perdido. Mientras que el Hubble realiza órbitas alrededor de la Tierra a 593 kilómetros sobre el nivel del mar (en promedio), el Webb estará a una distancia mucho mayor.
La potencia de ambos dispositivos también es muy diferente. James Webb será el telescopio espacial más grande de la historia (hasta ahora). En conjunto, sus espejos hexagonales miden 6.5 metros de diámetro; su superficie es capaz de recolectar 7 veces más luz que el Hubble. Este nuevo telescopio espacial tendrá una capacidad 100 veces mayor a la de su predecesor.
Para su funcionamiento se hizo un diseño que requiere cuidar muchos detalles. La temperatura de los instrumentos es importante, por eso cuenta con un escudo térmico de 5 capas milimétricas. Su tamaño es similar al de una cancha de tenis y mantendrá dos temperaturas completamente diferentes de cada lado; del lado que mira al Sol alcanzará los 85 grados Celsius, mientras que hacia la parte interna mantendrá -233 grados Celsius. La temperatura baja es indispensable para que funcionen sus instrumentos.
Mientras que el Hubble percibe la luz visible y ultravioleta, el Webb se enfocará en la luz infrarroja. Las nubes de polvo son un problema para el Hubble, en cambio Webb podrá ver a través de ellas, gracias al espectro de luz que percibe. Esto permitirá que observe dos grandes objetivos: el origen del universo y las atmósferas de los exoplanetas. Este nuevo telescopio espacial será capaz de captar la luz que emitió el universo hace 13,500 años, cuando se formaban las primeras galaxias y estrellas. En el caso de los planetas fuera de nuestro sistema solar, podrá evaluar con mayor precisión la presencia de agua, un factor indispensable para considerarlo habitable.
James Webb es una de las apuestas científicas más ambiciosas de la historia. Su lanzamiento debe ser preciso y no es posible que haya errores. Hasta ahora ha costado más de 10 mil millones de dólares. Es un proyecto internacional en el que colaboran la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio estadounidense (NASA), la Agencia Espacial Europea (ESA) y la Agencia Espacial Candiense (CSA). El telescopio espacial ya está empacado en el cohete Ariane 5 que lo llevará al espacio. Ahora sólo queda esperar un día más. Si las condiciones climáticas son adecuadas, el lanzamiento del James Webb llegará a tiempo, como un regalo de navidad para los observadores del cosmos.