¿EN QUÉ CONSISTE LA TEORÍA DE LA EVOLUCIÓN DE DARWIN? Copiar al portapapeles
POR: Deyanira Almazán
24 noviembre, 2023
Hace 164 años se publicó la primera edición de una de las obras más importantes para el pensamiento científico. Hablamos del trabajo del naturalista británico Charles Darwin: “El origen de las especies por medio de la selección natural”.
Durante su vida Darwin revisó el texto en varias ocasiones. Realizó seis versiones en los años posteriores: 1859, 1860, 1861, 1866, 1869 y 1872. Al inicio fue un libro que se recibió con sospecha pero hoy es uno de los pilares de la ciencia contemporánea.
Historia
Darwin nació el 12 de febrero de 1809 y murió el 19 de abril de 1882. Fue un naturalista inglés que postuló que todas las especies de seres vivos han evolucionado con el tiempo a partir de un antepasado común. Esto ocurre a través de un proceso denominado selección natural.
El desarrollo de las ideas que lo llevaron a desentrañar el proceso evolutivo comenzó cuando era muy joven. Se embarcó a los 24 años en el H.M.S. Beagle. El viaje duró 5 años y le permitió conocer a los pinzones de Darwin, un grupo de especies de pájaros con ligeras diferencias que les permitieron adaptarse al entorno de las islas Galápagos.
La teoría de la evolución de Darwin recae en la idea principal de que toda la vida está relacionada y que ha descendido de un ancestro común. Los pájaros, los plátanos, los peces y las flores. Todos estamos relacionados.
Desde un inicio se reconoció la importancia de la teoría que propuso Darwin sobre la evolución de las especies, por medio de la selección natural. Fue tan influyente en su momento como sigue siéndolo en la actualidad aunque con cambios importantes en las opiniones sobre ella.
Darwin no fue el primer naturalista en proponer la idea de que los seres vivos podían transformarse a través del tiempo. Lo que vuelve relevante su obra es que fue el primero que elaboró una teoría y un mecanismo con el que explica muy clara y detalladamente la evolución de las especies. Para demostrarlo recurrió a una argumentación extensa que describe la selección natural.
En la época en que se publicó se creía que las especies habían sido creadas y que no se transformaban, que eran fijas, lo que se denominaba fijismo. La idea de una adaptación al entorno causó revuelo cuando se publicó este libro, en 1859.
Darwin propuso exactamente lo contrario: la posibilidad de que los organismos cambian con el paso del tiempo, a través de un mecanismo que denomina selección natural. Los que se adaptan a las condiciones de su entorno serán capaces de permanecer y los que no, desaparecerán. Eso contradecía las creencias dominantes.
Selección Natural
La selección natural es el proceso por el cual los organismos cambian con el tiempo. Aparecen cambios físicos o de comportamiento que se heredan a través de varias generaciones. Estos cambios le permiten a los organismos adaptarse mejor a su entorno, lo ayudan a sobrevivir y así obtiene una descendencia capaz de sobrevivir.
La selección natural puede causar pequeños cambios en una especie. Por ejemplo, puede cambiar el color de piel o plumas, además del tamaño de una población a lo largo de varias generaciones. Esto se llama "microevolución". Un ejemplo de esto eran las variaciones en los picos de los pinzones de Darwin que observó en las islas Galápagos.
Pero la selección natural también es capaz de crear especies totalmente nuevas, lo que se conoce como "macroevolución". Con este mecanismo se explica la evolución de los dinosaurios en aves, los artiodáctilos anfibios (como los hipopótamos) en ballenas y los homínidos primitivos en simios por una parte y en seres humanos por otra.
La evolución por selección natural es una de las teorías mejor fundamentadas en la historia de la ciencia. Se apoya en la evidencia de una amplia variedad de disciplinas científicas que incluye a la paleontología, la geología, la genética y la biología del desarrollo.
El origen del hombre
Otro aspecto que llamó la atención de la evolución de los seres vivos, fue la inclusión del ser humano desde un primer momento. Por razones personales Darwin no quiso incorporar en “El origen de las especies” el capítulo que había dedicado a tratar la forma en que surgió el ser humano.
Las ideas relacionadas con nuestra especie las reservó para un libro que publicó más adelante con el título de “El origen del hombre” (1871). A pesar de que Darwin no quiso llamar la atención sobre el hecho de que los seres humanos habíamos estado sujetos y éramos parte de todo el proceso evolutivo, la reacción fue inmediata.
Al principio Darwin desarrolló el concepto de “descendencia con modificación”, posteriormente se le conocería como “evolución”. “El origen del hombre” fue la primera obra en que usó el término “evolución”. Posteriormente lo agregó a “El origen de las especies” en la quinta edición.
Darwin apartó al ser humano del centro de la creación y lo trató como una especie más de entre todas las existentes. Darwin refutaba la creencia de que existía un demiurgo creador, que en la tradición judeo-cristiana es Dios y esta figura benevolente había creado a todos los seres vivos, y éstos, una vez creados, se mantenían así por siempre.