¿Estamos ante un planeta que está formando sus lunas? Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
5 junio, 2019
Una de las razones para que Galileo considerara que la Tierra no es el centro del universo fueron los satélites de Júpiter. Desde su telescopio notó que no giraban en torno a la Tierra, sino al gigante gaseoso. El Doctor Valentin Christiaens, investigador en astrofísica de la Universidad Monash retoma la historia de Galileo para explicar el descubrimiento que él y su equipo publicaron en la revista científica The Astrophysical Journal Letters. El documento expone la evidencia sobre un planeta en formación que muestra un disco en donde podrían estarse formando sus futuras lunas.
Un planeta difícil de observar
La tecnología que nos ha dado el mayor número de descubrimientos de exoplanetas es la observación de tránsitos. Sin embargo, encontrar a PDS 70 b un método distinto. Al observar los tránsitos se reconoce la sombra que produce un planeta al pasar frente a su estrella. Esta es una técnica útil cuando el planeta ya está formado y realiza una órbita cotidiana pero no es el caso en esta ocasión.
Desde el Telescopio Muy Grande, ubicado en Chile, Christiaens y su equipo lograron observar un protoplaneta. Se usó el espectro infrarrojo para obtener imágenes en diferentes colores. PDS 70 b fue observado gracias a un algoritmo que arregló algunos detalles para que fuera visible. Un punto importante fue el brillo de su estrella, que tuvo que ser cancelado en la imagen final. Para reconocer a los planetas en sus alrededores un algoritmo computacional extrajo las señales débiles de conjuntos complejos de datos.
Con este método se obtuvo la imagen de un disco circumplanetario. Esto es algo que no se había hecho antes y ayuda a confirmar algunos creencias teóricas sobre cómo se forman los planetas y, en el caso de los gigantes gaseosos, sus satélites. Los investigadores buscaron planetas jóvenes, con menos de un millón de años de antigüedad.
“Creemos que las grandes lunas de Júpiter y otros gigantes gaseosos nacieron en un disco como este, así que nuestro trabajo ayuda a explicar cómo se formaron los planetas de nuestro Sistema Solar”, afirmó el Doctor Christiaens. La idea básica es que este disco de gas y polvo alrededor del protoplaneta con el tiempo tomará forma de satélites y así formaría un sistema similar al de los gigantes gaseosos de nuestro vecindario.
Nuestro Sistema Solar lleva mucho más tiempo que al que pertenece PDS 70 b. En nuestro caso, el sol y sus planetas llevan ya unos 4.6 mil millones de años. Esta diferencia en el tiempo de desarrollo ayuda a los astrónomos a reconocer las primeras fases de conformación de nuestro propio sistema solar.
Durante mucho tiempo los discos circumplanetarios estuvieron fuera del alcance de los astrónomos terrestres. Esta es la primera vez que se tiene registro de uno y confirma en parte lo que se predecía desde la teoría a través de cálculos complejos. No se trata de una demostración absoluta, ya que este protoplaneta aún está en formación. Lo que sí tenemos es, en palabras del Doctor Christiaens, “otra pieza del rompecabezas gigante de la formación planetaria”.
En un futuro muy lejano, si nos conservamos como especie, quizá se confirme desde el mismo PDS 70 b que se formó una luna o varias de ellas. Mientras tanto, los avances tecnológicos nos permiten acercarnos cada vez más a comprender lo que pasa en el universo. Tenemos una nueva pieza del rompecabezas, ¿cuántas más nos quedarán por descubrir?