Fractura de 112 km en la Antártida, amenaza con crear un iceberg del tamaño del estado de Delaware Copiar al portapapeles
POR: Alejandra Almed
12 junio, 2016
Científicos de la misión IceBridge, de la NASA, han observado un constante crecimiento en una enorme fractura sobre la plataforma de hielo Larsen C, en la Península Antártica. De seguir creciendo, la fisura podría separar por completo el hielo, formando un masivo iceberg en medio del océano.
Las observaciones revelan que la fractura tiene unos 112 km de largo y más de 500 metros de profundidad. La fisura corre hasta el fondo de la plataforma de hielo, aunque aún no llega a dividirla por completo. De acuerdo a cálculos de Daniel McGrath, un glaciólogo de la Universidad de Colorado, la reciente tasa de expansión y un rango de posibles trayectorias futuras, sugieren que lo más probable es que en algún momento de entre uno y cinco años, la fractura termine por romper la plataforma, creando un enorme iceberg del tamaño del estado de Delaware -o incluso más grande-.
Si bien esta imagen capturada por la NASA es la primera vista aérea de la fisura, McGrath y otros científicos aseguran que han estado monitoreándola con particular interés desde el 2014, cuando las imágenes satelitales mostraron su rápido crecimiento.
La presencia de grietas en una plataforma de hielo no es del todo inusual. De hecho, son una característica natural y esperada en un entorno tan dinámico. Lo preocupante, de acuerdo a los científicos, es cuando estas fracturas se desarrollan y se propagan en regiones donde no se había visto antes; como es el caso de la fractura recién observada.
La plataforma de hielo Larsen C se encuentra en aproximadamente el mismo sitio que las Larsen A y B, plataformas de hielo que se desintegraron en 1995 y 2002, respectivamente. Larsen C cubre unos 50,000 km cuadrados y es la mayor plataforma en la Península Antártica.
A pesar de que es incierto lo que le sucederá al resto de Larsen C cuando la fractura separe el hielo por completo, la preocupación de los científicos es que sea el comienzo de un efecto irreversible de un clima cálido que conlleve al eventual derretimiento de toda la plataforma, y a su vez un aumento en los niveles globales del mar.
Las plataformas de hielo como Larsen C actúan como muros de contención que actúan como anclas para atrapar los glaciares antárticos en tierra. En su ausencia, los glaciares continentales aceleran su caída al mar, ayudando a elevar el nivel del mar.
Como ejemplo, los glaciares que estaban detrás de la Larsen B están fluyendo ocho veces más rápido que como lo hacían antes de que la plataforma se derrumbara en 2002.
El siguiente mapa muestra la desintegración de una porción de la plataforma de hielo Larsen a principios de los años 2000. (Fuente: Scott Polar Research Institute)
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Fuentes: