Jacques-Yves Cousteau un siglo después Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
11 junio, 2024
Aún para quienes nacieron después de 1997, año en que murió Jacques-Yves Cousteau, las imágenes submarinas suelen acompañarse mentalmente con un acento francés. Este hombre se encargó de mostrar un mundo entonces desconocido a los curiosos que lo seguían por las pantallas.
Para explorar las profundidades marinas tuvo que desarrollar todo tipo de dispositivos novedosos. Si hoy los buzos pueden sumergirse de forma cómoda es gracias a Jacques-Yves Cousteau, mejor conocido como Jacques Cousteau.
El explorador de las profundidades
Jacques-Yves Cousteau nació el 11 de junio de 1910 en Saint André de Cubrac en Gironda, Francia, cerca del Golfo de Vizcaya. Estudió en diferentes partes del mundo como Roma, Burdeos, Nueva York, París y Ribeauvillé.
En el colegio Stanislas se preparó para el examen de la escuela naval. Se graduó como oficial de artillería en la Academia Naval francesa en 1930. Un accidente que afectó a sus dos brazos evitó que ejerciera, lo que no evitó que mantuviera su pasión por el mar.
Creó el grupo de estudios y de investigaciones submarinas (GERS) junto con Philippe Taillier. En 1943 participó en la creación de la escafandra autónoma de aire comprimido Cousteau Gagnan, uno de sus grandes aportes al buceo.
Fuera de su currículum, la vida de Cousteau siempre estuvo ligada a la vida marina. Cuando tenía cuatro años tuvo problemas de salud y los médicos recomendaron que practicara natación. Ahí comenzó su interés por el agua, los mares y océanos.
A los 13 años recibió como regalo de su padre una cámara de video. Unas décadas después la habilidad de Cousteau para registrar imágenes lo convertiría en un referente mundial. Su primer documental se llamó “A diez brazos bajo el agua”.
En 1936 decidió dedicarse a la exploración de los océanos, esto mientras buceaba en la costa mediterránea de Toulon. A partir de entonces se dedicó a mostrar al resto del mundo el mundo submarino.
Para conseguir su objetivo necesitaba moverse libremente bajo las aguas. En 1943 junto con el ingeniero Emile Gagnan, desarrolló el pulmón acuático o Acqua-Lung. El dispositivo era una escafandra autónoma que funcionaba con aire comprimido. Gracias a este dispositivo fue posible desplazarse libremente en las profundidades.
Una vez que terminó la Segunda Guerra Mundial la marina francesa le encomendó la tarea de desactivar bombas submarinas. Para ello puso a su disposición un barco y equipo especial.
En 1948 realizó una expedición submarina en el Mar Mediterráneo en busca del barco romano Mahdia que naufragó en el siglo I antes de la era común. Esta fue la primera expedición arqueológica subacuática de la historia en que los buzos usaron equipo autónomo para la inmersión.
En 1949 Cousteau abandonó la marina francesa para realizar sus expediciones de forma independiente. En 1950 rehabilitó un antiguo barco dragaminas y lo llamó “Calypso”.
Cousteau lo conoció en el puerto de La Valletta en la isla de Malta. Tras la remodelación se convirtió en el barco oceanográfico más popular del mundo.
La primera expedición del Calypso se dedicó al estudio de los corales en el archipiélago del Mar Rojo.
En 1953 Cousteau publicó el libro “El mundo del silencio”, donde narraba sus experiencias submarinas. En 1956 apareció la película del mismo nombre que dirigió Louis Malle, la cual ganó la Palma de Oro en el Festival de Cannes y el siguiente año el Óscar.
En 1960 presentó su "platillo de buceo". Se trataba de unos submarinos pequeños que tenían un diseño similar a los platillos voladores creados por la ciencia ficción. En ellos se podían hacer inmersiones a mayor profundidad. Para 1963 se construyó la primera base submarina donde Cousteau, acompañado de un equipo de expertos, permaneció durante 30 días.
Aunque Cousteau era una celebridad, la serie que lo catapultó a la fama fue “El mundo submarino de Jaques Cousteau”, que se transmitió entre 1968 y 1975. En ella exploraba el océano a bordo del Calypso. En ella el público descubría los ecosistemas submarinos en diferentes partes del mundo.
El Calypso se hundió en Singapur en 1996 y fue remolcado hasta Marsella. Un año después, el 25 de junio de 1997, murió su capitán: Jacques-Yves Cousteau. Unos meses antes había comenzado con problemas cardiacos. Fue enterrado en Saint André de Cubrac.
Fuentes
El legado del comandante Cousteau
Jacques Cousteau: el explorador que nos sumergió en las profundidades marinas
Jacques Cousteau: El hombre que enseñó a los humanos a respirar como los peces