Japón considera verter en el océano agua de la central nuclear de Fukushima Copiar al portapapeles

En 2011 un tsunami provocó varias fusiones nucleares en la planta nuclear de Fukushima. Desde entonces, almacenar el agua contaminada ha sido un problema. Este viernes, el Ministro de Industria japonés, Hiroshi Kajiyama, anunció que aún no hay una decisión definitiva pero el gobierno planea tomarla rápido. Según parece el océano Pacífico es el destino más probable y comenzaría a verterse en 2022. 

¿Qué hacer con residuos nucleares?

“Debemos tomar una decisión rápido para evitar retrasos en el proceso de desmantelamiento”, afirmó en conferencia de prensa Hiroshi Kajiyama. Pasarán al menos dos años para que el agua comience a enviarse al océano. Antes pasará por un proceso de filtrado para eliminar la mayor parte de sus contaminantes.

Otras opciones para esta agua contaminada con residuos nucleares sería la evaporación o el almacenamiento a largo plazo. En abril de este año, la Agencia Internacional de la Energía Atómica envió un equipo para evaluar la situación. Su dictamen indica que tanto la liberación por vapor como a través del mar son técnicamente factibles. Ambas acciones se realizan en plantas nucleares operativas.

Para integrarse con el agua del mar deben realizarse varios procesos de filtrado. Ya ha pasado por distintos procesos de filtrado antes y se han eliminado distintas sustancias radiactivas. Una de las que aún permanece es el tritio, las técnicas actuales no permiten su eliminación. El tritio es peligroso para la salud humana en dosis altas.

La posibilidad de verter el agua contaminada, aún después del filtrado, no es popular entre distintos grupos. Los pescadores y agricultores de la región no están de acuerdo. Sus productos ya han sufrido restricciones y temen que ahora se acentúe esta situación. Corea del sur ya prohíbe la importación de productos provenientes de Fukushima.

Corea del Sur, vecina de la zona, ya declaró su preocupación por la medida de verter el agua contaminada en el océano. Sus pruebas de radiación para alimentos de procedencia japonesa se han elevado. Aún con el filtrado existe desconfianza ante la medida.

1.2 millones de toneladas de agua contaminada

Actualmente se tienen almacenados casi 1.2 millones de toneladas de agua contaminada. Su origen es diverso, proviene tanto de la lluvia, como del manto subterráneo como de las inyecciones que se usaban para enfriar los núcleos antes del tsunami. El líquido se almacena en tanques dentro de las instalaciones de la planta nuclear. Que siga ahí es un problema para el proceso de desmantelamiento que, por ahora, se programa para realizarse durante varias décadas.

La planta nuclear de Fukushima: Daiichi, tardará mucho en desmantelarse. La planta es gestionada por la compañía Tokyo Electric Power Company Holdings Inc. Desde hace casi una década se planea este proceso, aún si el agua comienza a enviarse al océano en un par de años, tardará en deshacerse de los residuos. 

Los residuos nucleares son un problema para el que aún faltan muchas soluciones. Si bien es cierto que la capacidad generadora de energía de este tipo de instalaciones es mayor que otras fuentes, también incluye riesgos sobre los que aún quedan muchos detalles por resolver. En 2011 no se tenía un plan para administrar conflictos como un tsunami, aún hoy continúan las dudas. Si se aprueba el vertido del agua al océano no sólo se provocará el descontento de naciones vecinas y productores locales, también se tendrá un elemento nocivo en el Océano Pacífico: el tritio. Por ahora las autoridades ya anunciaron que este mes habrá una resolución.