La NASA lanza la sonda InSight para explorar el interior de Marte Copiar al portapapeles

Por: Antonio Medina

El pasado 5 de mayo, despegó rumbo a Marte la misión InSight de la NASA a bordo de un cohete Atlas V 401. El nombre de la misión proviene de las siglas en inglés: Interior Transportation using Seismic Investigaciones, Geodesy and Heat Transportation, que para no hacerles el cuento más largo se traduce en algo parecido a: Exploración interior utilizando investigaciones sísmicas, geodésicas y transmisión de calor; un nombre algo rebuscado, pero que denota a la perfección el objetivo final.

Esta misión pondrá en la superficie marciana un módulo de aterrizaje geofísico, que pretende estudiar las entrañas del planeta rojo. Por medio de sofisticados instrumentos geofísicos la misión InSight medirá los “signos vitales” de Marte. Podrá medir su pulso por medio de mediciones sismológicas; su temperatura en diferentes partes de su interior a través de una sonda de flujo de calor y finalmente sus reflejos por medio de un sistema de posicionamiento de precisión para conocer la forma en la que el planeta se mueve debido a las fuerzas de atracción de sus satélites y del Sol.

Aunque su verdadera trascendencia va mucho más allá de estudiar el interior de nuestro vecino, pues la InSight también develará los secretos del proceso de formación de los planetas rocosos en la parte interior del sistema solar. Es justamente por esta razón que se escogió a Marte para la misión, pues al ser un planeta con mucha menor actividad geológica que la Tierra, retiene una cantidad mayor de información dentro de sus bloques principales: el núcleo, el manto y la corteza. Algo que nos llevará a comprender de mucha mejor manera la forma en que se formó nuestro planeta.

Además de esto, la InSight lleva consigo un cargamento muy especial y es que desde hace algunos años, la NASA lanzó un programa donde el público podía inscribirse y proporcionar sus datos, con la promesa de que un chip con su nombre grabado sería enviado a Marte. En total la sonda marciana lleva 2.4 millones de nombres consigo. Se preguntarán cómo es que lleva tanto cargamento y la respuesta es más que sencilla. Los nombres fueron grabados por medio de un haz de electrones de solo una milésima parte del ancho de un cabello humano, por lo cual dentro de una oblea de silicio de 8mm (donde fueron grabados), caben miles de nombres.

Se planea que el módulo aterrice en la superficie marciana el 26 de noviembre de 2018, después de un viaje de 6 meses y medio y 484 millones de kilómetros. Dado que la tecnología utilizada está basada en la que se uso con la sonda Phoenix, los costos de la misión bajaron drásticamente y se redujo la probabilidad de falla al mínimo. Se espera que la misión InSight sea todo un éxito y nos permita conocer un poco más de Marte y así seguir explorando la posibilidad de algún día colonizar a nuestro vecino rojo.