Las aves no logran adaptarse al cambio climático Copiar al portapapeles

En los últimos años hemos visto aparecer estudios cada vez más específicos sobre el impacto que tiene el cambio climático en algunas especies. Recientemente la revista Nature Communications publicó un artículo que documenta lo que ocurre con las aves. La Doctora Viktoriia Radchuk, del Departamento de Ecología Evolutiva del Instituto de Investigación Leibniz de Zoología y Vida Silvestre, directora de la investigación, y su equipo de colaboradores analizaron 71 estudios relacionados con la adaptación de distintos animales al cambio climático. Eligieron a las aves para analizar la forma en que estas se han adaptado al nuevo clima.

¿Cómo adaptarse a un clima cambiante?

Quienes hayan visto la película Mimic de Guillermo del Toro recordarán que el monstruo tiene su origen en un largo proceso evolutivo, algo así intentan las aves. En la película, una especie de insecto se reproduce rápidamente haciendo modificaciones en cada generación hasta que alcanzan un tamaño y forma parecidos al humano. Una reproducción rápida parecería la mejor forma de pulir características de una especie para adaptarse mejor pero algo no está funcionando todavía con las aves.

En el estudio citado se mencionan 3 características para que un organismo se adapte. La primera es que haya cambios en el clima. La segunda es que esas condiciones climáticas nuevas afecten las características de la especie. La última es que estos cambios representen una mejora en las condiciones de vida de la especie que se adapta. Los investigadores reconocen las dos primeras pero no confían en que ocurra la tercera.

Un detalle importante para la investigación publicada por Nature Communications es la modificación del fenotipo en distintas especies de ave. El fenotipo se refiere a las características físicas y de comportamiento propios de una especie y que se heredan genéticamente. Si en algún momento un pico más grande, o grueso es útil para la especie este rasgo se heredará y pasará a ser parte de su fenotipo; en la película de del Toro el monstruo pasa desapercibido gracias a que su cuerpo es parecido al de los humanos. 

Otro aspecto importante para entender el fenotipo son los comportamientos. Cada especie guarda ciertos hábitos necesarios para su supervivencia. Por ejemplo, los hábitos de sueño o la edad reproductiva. La Doctora Radchuk y su equipo encontraron que diferentes especies de ave están acelerando su edad reproductiva. Si se reproducen más jóvenes podría esperarse que las nuevas generaciones nazcan con mayor resistencia al nuevo clima pero no encontraron evidencia de que sea así.

Las aves se están reproduciendo más rápido pero no ha representado una ventaja para sobrevivir a su entorno. Si en Mimic la especie del monstruo no hubiera alcanzado dimensiones humanas la reproducción acelerada no le habría dado ninguna ventaja y eso es lo que está pasando con las aves. Ese tercer factor para la adaptación no se reconoce, al menos no de forma significativa en las poblaciones que se analizaron.

Los investigadores aclaran que es pronto para una conclusión definitiva. Si bien, en otros casos como los insectos existe una larga serie de estudios, en el caso de las aves es aún poco el trabajo que se ha hecho. El conocimiento sobre lo que está pasando con las distintas especies que habitan nuestro planeta nos ayudará a tomar mejores decisiones en políticas públicas para favorecer su permanencia en el planeta. Por ahora sabemos que las aves se están reproduciendo cada vez más jóvenes pero algo falta en ese cambio para que resistan mejor los climas cada vez más extremos con temperaturas altas, lluvias y sequías extremas. Este análisis es únicamente el primer paso.