Las sequías ponen en riesgo la capacidad de adaptación del Amazonas Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
5 agosto, 2022
La selva tropical del Amazonas está en riesgo ante el cambio climático. En las últimas décadas ha experimentado sequías severas como en 2005 y 2010. Un estudio publicado recientemente en la revista científica Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) afirma que en las próximas décadas serán más frecuentes e intensas.
Para la segunda mitad de este siglo las sequías serán parte del clima normal en esta región del mundo. De acuerdo a sus resultados, el equilibrio hidrológico de la región no resistirá las nuevas condiciones.
Una selva tropical ante la sequía
El bioma amazónico es rico en humedad. La lluvia hidrata el suelo, desde donde nutre a las plantas que transpiran y producen evaporación. El sistema hídrico del Amazonas es eficiente y recicla el agua. Sin embargo, para funcionar depende del agua que ingresa y ésta cada vez es menos.
La región más afectada hasta ahora es el borde sur de la selva amazónica. Además del área afectada directamente, los efectos van más allá en un factor de 1 a 3. Las zonas donde no llueve se secan y al mismo tiempo dejan de aportar humedad al resto de la región. Al tener un área menor donde se recicla el agua, el volumen del líquido disminuye drásticamente en todo el sistema.
“Las sequías más intensas ponen a partes de la selva amazónica en riesgo de secarse y morir. Posteriormente, debido al efecto de red, menos cubierta forestal conduce a menos agua en el sistema en general, y por lo tanto desproporcionadamente más daño”, explica Nico Wunderling del Instituto Potsdam de Investigación del Impacto Climático.
“Y aunque hemos investigado el impacto de la sequía, esa regla también se aplica a la deforestación. Significa esencialmente, cuando talas un acre de bosque, lo que en realidad estás destruyendo es 1.3 acres”, explica Wunderling quien aparece como primer firmante en el documento. Esto crea una tendencia al aumento de sequías.
Mientras que las sequías de 2005 y 2010 fueron eventos extraordinarios, para 2050 este tipo de eventos serán normales en el Amazonas. Para 2060 las sequías podrían estar presentes en 9 de cada 10 años. Este nuevo panorama hídrico cambiará por completo la red hídrica del Amazonas.
“Utilizamos estas observaciones para entender y modelar las consecuencias de un clima futuro que se asemeja a una estadística de sequía permanente”, menciona Henrique Barbosa, quien es profesor de física en la Universidad de Maryland en el condado de Baltimore. Existe el riesgo de que la selva amazónica no logre adaptarse a estos cambios, al menos no en su totalidad.
“En el Amazonas, los árboles y los sistemas forestales se adaptan de manera diferente a la disponibilidad de agua, ya que algunas regiones suelen presentar una estación seca distinta, mientras que otras tienen lluvia durante todo el año. Reconocemos específicamente estas adaptaciones locales ya que pueden ser una bendición o una maldición bajo el cambio climático”, detalla Boris Sakschewski del Instituto Potsdam, quien participó en el estudio.
Ricarda Winkelmann del Instituto Potsdam, quien participó en el estudio, aclara que aún no se ha perdido todo. Señala que las zonas más afectadas se encuentran al sur de la selva amazónica y buena parte de ella se encuentra en condiciones estables. Las actividades humanas son la causa del deterioro en las zonas más afectadas, específicamente por el cambio en el uso de suelo para pastoreo y siembra de soya.
“Todavía hay mucho que podemos hacer para tratar de estabilizar la Amazonia, ya que su preservación y sus servicios ecológicos son de suma importancia para la estabilidad climática local, regional y global”, menciona Winkelmann. El investigador sugiere reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y con esto limitar los efectos del calentamiento global. La selva amazónica no será la única beneficiaria si esto se logra.