Perseidas, una de las mejores lluvias de estrellas del año
8 septiembre, 2017
Las Perseidas, es la lluvia de estrellas más confiable del año, y una de las más espectaculares. Este año, alcanzará su máxima actividad entre la noche del 12 y la madrugada del 13 de agosto. Durante estos días se podrán observar entre 50 y 100 meteoros por hora; aunque este año, la presencia de la Luna interferirá un poco con la visibilidad.
Las Perseidas suceden cada mes de agosto, a medida que la Tierra pasa por la nube de polvo y escombros dejados por el cometa Swift-Tuttle. En el espacio, estas partículas viajan a una velocidad de 60 km por segundo, la mayoría son del tamaño de granos de arena, algunos quizá del tamaño de una canica. Cuando chocan contra la atmósfera de la Tierra y se queman, producen destellos brillantes en el cielo que vemos como meteoros o estrellas fugaces. Casi ninguna llega a tocar el suelo, pero si lo hacen, se llaman meteoritos.
¿Cómo verlas?
Aunque parecen irradiar desde un punto en la constelación de Perseo, pueden ser vistos en cualquier lugar del cielo. Sin embargo, el hemisferio norte suele tener ventaja ya que en el hemisferio sur, el radiante siempre se mantiene cerca del horizonte en dirección norte. Aún así, el número de meteoros visibles por hora sigue siendo importante en la parte meridional del planeta.
A medida que la Tierra gira, el lado que mira hacia la dirección de su órbita alrededor del sol tiende a enfrentarse con más desechos espaciales. Esta parte del cielo se ubica por encima del observador al amanecer. Por esta razón, las Perseidas y otras lluvias de meteoros suelen verse mejor en la madrugada.
Para verlas recuerda encontrar un lugar oscuro, lejos de las luces de la ciudad y esperar unos 30 a 40 minutos para que tus ojos se acostumbren a la oscuridad del cielo. La constelación de Perseo aparece en el cielo nocturno alrededor de las 10 p.m., hora local, pero la mayoría de los meteoros serán visibles después de la medianoche.
Sobre el Swift-Tuttle
La ultima vez que la Tierra vio al cometa Swift-Tuttle fue en 1992, un paso inesperado a través del sistema solar interior que requirió de binoculares para disfrutarlo. Antes de esto, había sido visto por última vez en 1862, el año en que fue descubierto por los astrónomos estadounidenses Lewis Swift y Horace Tuttle.
Este cometa tiene un núcleo de unos 26 km de ancho, aproximadamente igual al meteorito que aniquiló a los dinosaurios. Es el objeto más grande conocido en pasar repetidamente cerca de la Tierra.
El Swift-Tuttle volverá en el 2126 y los astrónomos creen que podría convertirse en un espectacular cometa para ser observado a simple vista. Si los cálculos históricos son correctos entonces la aparición en este año marcará el tercer milenio de la observación humana del cometa, asumiendo claro, que alguien esté presente para observarlo.