¿Qué pasaría si el supervolcán Yellowstone hiciera erupción? Copiar al portapapeles
POR: Alejandra Almed
28 mayo, 2019
Todos los años, los temores de una erupción de este supervolcán inundan los medios y las redes sociales. El 2016 no es la excepción, pero los científicos del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), como todos los años, ya han tranquilizado a la gente, asegurando que la posibilidad de que el supervolcán haga erupción es de 0.00014%.
Esto no significa que los investigadores hagan caso omiso de las posibles consecuencias de una erupción. Junto con la previsión de daños, los científicos monitorean constantemente la región en busca de signos de incremento de actividad y estudian a detalle las últimas supererupciones, así como explosiones más pequeñas, para predecir lo que sucedería si el volcán de Yellowstone estallara de pronto.
Veamos el escenario
La mayor parte del Parque Nacional de Yellowstone se encuentra dentro de tres calderas superpuestas. Las depresiones poco profundas se formaron cuando una cámara de magma subterránea hizo erupción en Yellowstone. En cada ocasión, el material arrojado fue tanto que el suelo se derrumbó, creando una caldera. Las explosiones de gran intensidad sucedieron hace 2.1 millones, 1.3 millones y 640,000 años. Estas erupciones pasadas sirven como pistas para entender lo que sucedería si hubiera otra mega explosión en Yellowstone.
De acuerdo con el USGS si sucediera una erupción de tal magnitud, la lava no sería tan preocupante como la ceniza, pues los flujos de lava de las erupciones pasadas no viajaron mucho más allá de los límites del parque. Pero en cambio, la ceniza es lo que más preocupa a los vulcanólogos. Imagina un círculo de unos 800 kilómetros de ancho que rodea Yellowstone; los estudios sugieren que la región dentro de este círculo podría ver más de 10 centímetros de ceniza en el suelo.
La ceniza sería bastante devastadora para todo Estados Unidos. Las consecuencias podrían incluir la destrucción a corto plazo de la agricultura del medio oeste del país así como los ríos y arroyos que se cubrirían de lodo.
Las personas en el noroeste del Pacífico también podrían sofocarse por la nube de ceniza emitida por Yellowstone. Por su parte, California y Florida, que crecen la mayoría de frutas y verduras del país, sólo vería una pequeña capa de ceniza.
También sería probable que arrojara grandes cantidades de gases como dióxido de azufre, que forma un aerosol de azufre que absorbe la luz solar y la refleja de vuelta al espacio. El enfriamiento climático resultante podría durar hasta una década. El cambio climático podría alterar temporalmente los patrones de lluvia, junto con fuertes heladas, causar pérdidas de cosechas generalizadas y hambruna.
El escenario es aterrador, sin embargo, a diferencia de lo que algunos sugieren, no acabaría con la vida en la Tierra. No hubo ninguna extinción después de las tres erupciones masivas de Yellowstone, además, de que ninguna otra supererupción ha desencadenado extinciones masivas en los últimos millones de años.
Sin embargo, los científicos están de acuerdo en que todavía hay mucho que aprender sobre los efectos globales de las supererupciones. El problema es que estas explosiones masivas son poco frecuentes y afectan en algún lugar de la Tierra sólo una o dos veces cada millón de años.
Ahora bien, ¿qué tan probable es que haga erupción este año?
Según los científicos muy poco probable. No existe una piscina de roca fundida agitándose debajo de los icónicos géiseres de Yellowstone y las aguas termales. La corteza y el manto de la tierra por debajo de Yellowstone están realmente calientes, pero en su mayoría son sólidos, con pequeñas partes de roca fundida repartidos. El 15 de mayo de 2015, un grupo de científicos señaló en la revista Science que aproximadamente el 9 por ciento es material caliente que se funde, y el resto es sólido. Esta cámara de magma descansa entre 5 a 10 km por debajo del parque.
Las estimaciones varían, pero una cámara de magma puede necesitar un 50 por ciento de masa fundida acumulada antes de que suceda una erupción y la mayoría de los científicos creen que la acumulación de magma sería detectable durante meses, tal vez años, antes de una gran erupción.
Las señales de advertencia incluirían un enjambre sísmico, emisiones de gases y la rápida deformación del suelo.
Yellowstone es un volcán vivo, y siempre hay pequeños terremotos que causan tremores y gas que se filtra desde la tierra. Pero la agitación actual del parque, de acuerdo al USGS, no pronostica ninguna catástrofe.