Se confirma un quinto océano: el Austral Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
15 junio, 2021
En el último siglo se ha hablado cada vez con más intensidad y cotidianidad sobre el Océano Austral. Sin embargo, este cuerpo de agua es tan particular que no se le había reconocido oficialmente como tal. El pasado 8 de junio de 2021, cuando se celebró el Día Mundial de los Océanos, la National Geographic Society reconoció que las características particulares de esta región oceánica alrededor de la Antártida le hacen merecedor de ser clasificado por su propia cuenta.
Un océano diferente
La división habitual para los océanos son los cuerpos de tierra; los límites entre el Atlántico, Pacífico, Índico y Ártico son los continentes. Sin embargo, alrededor de la Antártida sólo hay agua y no hay otro cuerpo terrestre que haga notar que ahí termina su espacio. Por mucho tiempo se consideró que el agua alrededor del continente helado pertenecía al Atlántico, Pacífico e Índico, de acuerdo a su longitud.
Si buscamos una frontera entre los tres océanos vecinos y el Austral, la encontraremos en una forma muy distinta a lo que ocurre con los otros. La Corriente Circumpolar Antártica, ACC por sus siglas en inglés, funciona como frontera natural para el océano del sur. Se estableció ahí hace 34 millones de años, después de la separación entre Sudamérica y Antártida. A partir de entonces el flujo oceánico quedó libre en el hemisferio sur.
Hasta ahora el debate sobre el Océano Austral era sobre si tenía suficientes características propias para ser considerado aparte. “El océano Austral ha sido reconocido por los científicos durante mucho tiempo, pero como nunca hubo un acuerdo internacional, nunca lo reconocimos oficialmente”, explica Alex Tait. Este científico, junto con el comité de política de mapas de la National Geographic Society, para la que trabaja, consideraron durante años el cambio en la forma de llamar al agua que rodea a la Antártida.
“Bordeado por la veloz Corriente Circumpolar Antártica, es el único océano que toca otros tres y abraza completamente un continente en lugar de ser abrazado por ellos”, explica la bióloga marina y exploradora de National Geographic Society, Sylvia Earl, a través de un comunicado. "Si bien hay un solo océano interconectado, felicitamos a National Geographic por reconocer oficialmente el cuerpo de agua que rodea la Antártida como el océano Austral", celebra la científica.
El Océano Austral es único en varios sentidos. La corriente oceánica que lo delimita, la ACC transporta más agua que ninguna otra en el planeta. Fluye de oeste a este alrededor de la Antártida. Esta corriente tiene la particularidad de atraer las aguas del Atlántico, Índico y Pacífico para formar un efecto conocido como “cinta transportadora”, que se encarga de distribuir calor a través de todo el planeta. El agua fría y densa que llega hasta el Océano Austral se hunde y propicia que se almacene carbono en las profundidades del océano, lo que tiene un impacto en el clima mundial.
En los últimos años, la ACC se ha visto afectada por el cambio climático pues sus aguas, típicamente frías, están elevando su temperatura. Por ahora no se sabe cómo es que este cambio en la temperatura afecta a la Antártida. Hasta ahora se sabe que entre las regiones más afectadas por el cambio climático están las plataformas de hielo cercanas a la ACC.
Uno de los objetivos para reconocer a esta región como un océano aparte es promover su conservación. Ahí existen especies que no habitan en ninguna otra región del mundo. Además, es un punto migratorio importante que permite la conservación de la biodiversidad en nuestro planetas. El océano Austral "abarca ecosistemas marinos únicos y frágiles que albergan una maravillosa vida marina, como ballenas, pingüinos y focas", de acuerdo a Enric Sala, quien es explorador de National Geographic.
La amenaza de extinción no es ajena a esta región del mundo. Especies como el krill (del que se alimentan las ballenas jorobadas) o la austromerluza se encuentran en riesgo desde hace décadas; en 1982 se establecieron límites de captura en la región. Actualmente, el mar de Ross aloja al Área Marina Protegida (AMP) más grande del mundo, la cual se estableció en 2016. Se espera que al reconocerlo como un espacio único, el Océano Austral tendrá una visibilidad mayor y las acciones de protección serán más certeras.