“Sol artificial” chino supera la temperatura del sol de forma experimental Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
16 enero, 2022
El poder del sol en la palma de la mano del Doctor Octopus es una imagen que los fanáticos de Spiderman recordamos este invierno. Fuera del campo de la ficción, con un diseño completamente diferente al reactor de la película de 2004, el “sol artificial” chino superó durante 17 minutos la temperatura del sol. Este proyecto busca obtener una fuente energética inagotable. Si bien, la energía nuclear ya se conoce desde hace tiempo, el Superconductor Experimental Avanzado Tokamak (EAST, por sus siglas en inglés), promete una fuente energética mucho más poderosa de lo que se conoce hasta ahora y más segura.
Más caliente que el sol, por unos minutos
El EAST es un proyecto ubicado en el Instituto de Ciencias Físicas de Hefei, parte de la Academia China de Ciencias. Se describe como un dispositivo no-circular experimental de plasma en estado estable. De acuerdo a los reportes del diario Independient, con información retomada de la agencia china Xinhua, ya ha alcanzado una temperatura equivalente a 5 soles.
Durante 17 minutos, el EAST alcanzó los 126 millones de grados Fahrenheit, equivalentes a 70 millones de grados Celsius. Como referencia, nuestra estrella irradia a 10 mil grados Fahrenheit en su superficie, equivalentes a 5 mil 537.8 grados Celsius. En el núcleo solar se alcanzan temperaturas de 27 millones de grados Fahrenheit, que equivalen a casi 15 millones de grados Celsius.
¿Por qué alguien querría un sol artificial? La respuesta está en el consumo de energía. Actualmente, gran parte de la energía que consumimos se obtiene a partir de combustibles fósiles. Recursos como el carbón, el petróleo o sus derivados, son finitos y algún día se agotarán. En cambio, al imitar los procesos físicos que ocurren dentro del sol se tendría acceso a una gran cantidad de energía. Además, a diferencia de la energía nuclear actual, no crearía desechos radiactivos.
La energía nuclear que se ha probado hasta ahora proviene de la fisión nuclear. En este proceso se divide un núcleo en otros más livianos; como resultado surgen algunos residuos. En cambio, la fusión nuclear une núcleos para formar uno más pesado, de esta forma se genera una gran cantidad de energía y se produce un estado de plasma. Este proceso, que por mucho tiempo estuvo fuera de las posibilidades reales, representa un riesgo menor para el medio ambiente y no genera residuos.
“La reciente operación sienta una sólida base científica y experimental para el funcionamiento de un reactor de fusión”, declaró Gong Xianzu a la agencia noticiosa Xinhua, él es investigador en el Instituto de Física de Plasma de la Academia China de Ciencias. Aunque el camino para investigar las posibilidades de este “sol artificial” es largo, ya está demostrando su capacidad para imitar los procesos de fusión en nuestro sol.
Aunque se le suele llamar “sol artificial”, el dispositivo no es una esfera luminosa que se desplace por el cielo. El EAST recurre a campos magnéticos para controlar al plasma y el gas ionizado a temperaturas altas en un trayecto que regresa a sí mismo conocido como toroide. Tanto el plasma como el gas llegan a ser inestables. Dentro del dispositivo se calientan isótopos pesados de hidrógeno como deuterio o tritio mediante láseres. Ahí dentro se alcanzan temperaturas de millones de grados que imitan los procesos de fusión que ocurren en las estrellas. El “sol artificial” chino se encuentra anclado a tierra pero imita procesos que desde hace tiempo se conocen en los cuerpos celestes.
En un futuro, la energía que produce este dispositivo podría alimentar a todos los dispositivos humanos con mucho menos recursos de los que se requieren ahora. Para ejemplificar esto tomemos al deuterio, que se puede obtener de los océanos. Con un litro de agua de mar sería posible obtener la misma cantidad de energía que se obtiene con 300 litros de gasolina actualmente. Eso sería un gran apoyo para nuestro planeta que ya resiente el consumo excesivo de recursos naturales.
El EAST no es el único proyecto de este tipo. Para 2025 se tiene programado que comience a funcionar el Reactor Experimental Termonuclear Internacional (ITER, por sus siglas en inglés). En él participan 35 países y será el reactor nuclear más grande del mundo. En él participan Estados Unidos, China, India, Reino Unido y los estados de la Unión Europea. Por ahora ya tenemos avances desde China sobre lo que veremos en los próximos años.