Stephen Hawking dice que tendremos que abandonar la Tierra en 100 años
5 abril, 2017
Por: Antonio Medina
Esta no es la primera vez que el laureado Físico Stephen Hawking ha declarado que el tiempo del ser humano en la Tierra está por agotarse. Pero en esta ocasión Hawking, ha dicho que si la raza humana quiere perdurar tendría que abandonar el planeta en tan sólo 100 años, algo que suena realmente alarmante en caso de que llegara a ser una verdadera necesidad.
Es claro que el cambio climático, la sobrepoblación, la escasez de agua, los conflictos políticos y bélicos podrían terminar por amenazar la supervivencia del ser humano en los años próximos, pero antes de encender las alarmas, empezar a hacer las maletas y planear nuestra migración a algún otro planeta, hay que preguntarnos si de verdad el ser humano será capaz de dejar la Tierra en menos de un siglo.
El principal problema de tener que dejar nuestro hogar sería encontrar uno que tuviera las características necesarias para poder sobrevivir. Hasta el momento se han encontrado planetas y lunas que comparten similitudes con nuestro planeta, incluso existe la posibilidad de que uno de los siete planetas encontrados recientemente en el sistema Trappist 1 pueda ser viable como nuestro nuevo hogar. El único problema es que está muy lejos, 39 años luz de distancia para ser exactos, y con la tecnología actual nos llevaría miles de años llegar.
La opción más viable tendría que ser nuestro planeta vecino Marte. A pesar de que no es una réplica exacta de la Tierra, de que su aire no se puede respirar, que su suelo es tóxico para el ser humano y que literalmente podríamos congelarnos con su clima, es probable que se pudiera mantener una colonia humana en el Planeta Rojo. El mayor problema que representa una migración a Marte es que se dependería completamente de paquetes de suministros enviados desde la Tierra, pues al fin y al cabo sería imposible recrear todas las condiciones de nuestro planeta.
La cantidad de migrantes sería otro de los principales problemas a resolver en los próximos 100 años. Necesitaríamos enviar una gran cantidad de personas para poder asegurar la supervivencia de la raza humana.
El primer problema que surge es que para construir una colonia en otro mundo “habitable” –dentro o fuera de nuestro Sistema Solar- probablemente tardaríamos algunos cientos de años, tiempo en el cual, el grupo se vería reducido significativamente por diferentes factores. Esto sin mencionar que aún no contamos con la tecnología necesaria para desarrollar una nave que pudiera llevar una muestra significativa de seres humanos en un viaje interplanetario o incluso intergaláctico.
Si pensamos que SpaceX, la compañía de Elon Musk, intentará llevar 100 personas al mismo tiempo a Marte, algo que ya representa un verdadero reto, llevar miles de personas a otro lugar se antoja, por ahora, imposible.
Y por supuesto que además de todas estas agravantes, tendríamos el dilema ético, de quiénes serían los colonos de esta nueva Tierra. ¿Serán los científicos más brillantes, las personas más ricas, los líderes del mundo, los jóvenes? ¿La gente sin recursos tendrá que vivir condenada a lo que resta de la Tierra?
Ahora bien, supongamos que hemos sorteado todos los problemas mencionados anteriormente y conseguimos establecernos en algún planeta, con una colonia que ha sobrevivido a las inclemencias del viaje y que es una muestra suficientemente grande como para sobrevivir y asegurar el futuro de la raza humana. Lo que sigue es adaptarnos a las condiciones de nuestra nueva casa y sobre todo adaptar el ambiente para que cumpla con nuestras necesidades.
Seguramente podremos construir una colonia terrestre en Marte, pero esto no sería suficiente para que la raza humana sobreviva. Tendríamos que convertir el ambiente marciano en algo parecido al de la Tierra y solamente para que la atmósfera de Marte se vuelva respirable, tendrían que pasar unos 100 mil años, algo que complicaría nuestra tan urgente migración.
Dejando de lado las necesidades humanas, también tenemos otro gran problema: ¿quién demonios va a pagar por esta migración? La NASA acaba de anunciar que su viaje a Marte, programado para el año 2030, tendrá un costo de 1.5 billones de dólares. Por su parte, SpaceX ya tiene la intención de construir un transporte interplanetario, pero por el momento no sabe cómo va a financiar la construcción, pues el costo es tan grande que ni si quiera una compañía como la del millonario Elon Musk podría pagarlo.
¿Estados Unidos y las grandes potencias del mundo? Los problemas políticos y económicos que pudieran surgir en caso de no llegar a algún acuerdo, podrían terminar por condenar a la raza humana.
El último gran problema que surge al pensar en la migración a otro mundo es la tendencia del hombre a repetir sus errores, algo que ha hecho durante toda su existencia.
Aún si lográramos conseguir colonizar otro planeta: sobreponernos a los problemas del viaje, del medio ambiente y pudiéramos costear la migración, tendríamos todavía que enfrentar los problemas que hoy nos aquejan en la Tierra. Nadie podría garantizar que esta nueva colonia humana no terminaría por cometer los mismos errores que nos llevaron a emigrar de nuestro planeta en primer lugar.
Así que, desde nuestro particular punto de vista, dos son nuestras tareas urgentes: ser más conscientes con nuestro planeta y seguir explorando nuevos mundos.