Una construcción de estilo teotihuacano despierta dudas sobre la historia de Tikal
23 abril, 2021
La ciudad maya de Tikal ubicada al norte de Guatemala guarda una historia con algunos huecos con la no tan cercana civilización de Teotihuacán. En el año 378 de la era común, el 16 de enero de ese año, comenzó una invasión de extranjeros del norte. Como consecuencia el gobernante de Tikal murió y la ciudad quedó bajo control de los invasores. Un nuevo hallazgo arqueológico sugiere que quizá no se trató de un ataque fortuito, sino del resultado de la ruptura diplomática con Teotihuacán.
Una embajada sepultada bajo la selva
En 2018 una revisión con Lidar mostró que en la ciudad Maya de Tikal había una construcción desconocida. Lidar es una tecnología basada en láser que es capaz de reconocer objetos bajo la espesura de la selva, para esto se sobrevuela la región a escanear y se irradia el láser. En aquella ocasión se reconoció un gran jardín cerrado con una pirámide en su lado este.
La construcción recordaba a la estructura de la ciudadela de Teotihuacán. El arqueólogo Edwin Román Ramírez, quien pertenece a la Fundación para la Cultura y Herencia Natural Maya, decidió comenzar una excavación. En ella encontró objetos de estilo teotihuacano, entre ellos había armas (algunas de ellas fabricadas con obsidiana verde del centro de México), incensarios, imágenes talladas del dios de la lluvia teotihuacano, así como un entierro de estilo teotihuacano.
La datación por radiocarbono de los objetos se retrasó por la pandemia de Covid-19. El estilo de los objetos de cerámica encontrados en la construcción hacen pensar que se construyó alrededor del año 300 de la era común. Esto sugiere que la relación entre Tikal y Teotihuacán es más antigua que aquél encuentro bélico en el que el gobierno de la ciudad maya fue depuesto.
Los hallazgos aún no son definitivos. “No podemos decir con toda seguridad que la gente que lo construyó fuera de Teotihuacán”, explicó Román Ramirez. “Pero ahí había gente que claramente estaba familiarizada con su cultura y sus tradiciones”, agrega. El análisis de isótopos en los restos del entierro ayudarán a reconocer los lugares en que vivió el cadáver.
El descubrimiento de una construcción con estilo teotihuacano, y que resguarda objetos que hacen referencia a la misma cultura, es una pieza de un gran rompecabezas. Otra de ellas se encuentra en Teotihuacán, donde recientemente se descubrieron murales de estilo maya; su destrucción coincide con el ataque a Tikal en el año 378.
La construcción de este edificio de estilo teotihuacano en territorio maya es previa al conflicto bélico. Una de las sospechas que surgen ahora es que previo a la confrontación, estas dos ciudades mantuvieron relaciones diplomáticas. Esta construcción habría funcionado como embajada teotihuacana en Tikal. Por ahora se trata de una suposición y habrá que continuar con las excavaciones y el estudio de lo que ahí se encuentre para confirmar o refutar esta nueva hipótesis.