Investigadores suecos crean el primer transistor de madera
30 abril, 2023
El transistor es un invento de mediados del siglo XX. En casi tres cuartos de siglo se ha convertido en una pieza indispensable para el desarrollo tecnológico.
Una colaboración entre la Universidad de Linköping y el Real Instituto de Tecnología KTH dio como resultado el primer transistor de madera. Por ahora se trata de un prototipo lento y voluminoso pero es apenas un primer paso para transformar la forma de fabricar electrónicos.
Una nueva versión de un viejo conocido
El material más común para fabricar transistores es el silicio. Este primer transistor de madera permite imaginar un futuro en que los electrónicos pueden fabricarse con otro tipo de materiales.
“Hemos llegado a un principio sin precedentes. Sí, el transistor de madera es lento y voluminoso, pero funciona, y tiene un gran potencial de desarrollo”, menciona en un comunicado Isak Engquist, quien es profesor asociado senior en el Laboratorio de Electrónica Orgánica de la Universidad de Linköping y participó en el proyecto.
Los transistores actuales se fabrican a nanoescala. Estos dispositivos regulan la corriente que pasa a través de ellos; son capaces de funcionar como interruptores para encender o apagar.
En pruebas anteriores los transistores de madera habían regulado el transporte de iones. Cuando estos últimos se agotaban el transistor dejaba de funcionar. El nuevo prototipo funciona continuamente y regula el flujo de electricidad sin deteriorarse.
Los investigadores usaron madera de balsa, un árbol que crece en selvas subtropicales de Colombia, Ecuador y Centroamérica. Los investigadores buscaron una madera sin granos que estuviera estructurada de manera uniforme.
Para crear el transistor removieron la lignina de la madera, esta sustancia es parte de la pared celular de muchas células vegetales y les dan dureza y resistencia. Los canales que quedaron se rellenaron con un polímero llamado PEDOT:PSS. El resultado fue un material eléctricamente conductivo a base de madera.
Este material permitió construir el transistor. Este dispositivo puede regular la corriente eléctrica y ofrece una salida continua a un nivel elegido. Sobre su capacidad de encendido y apagado presenta un ligero retraso; para encender tarda cinco segundos y para apagar un segundo.
En la Universidad de Linköping se tiene un área de investigación de plantas electrónicas. Esta es una de las aplicaciones posibles para los transistores de madera. Una de sus ventajas es que posiblemente es capaz de tolerar corrientes más altas que otros transistores orgánicos, esto ayudaría a encontrarle nuevas funciones en el futuro.
“No creamos el transistor de madera con ninguna aplicación específica en mente. Lo hicimos porque podíamos. Esta es una investigación básica, que demuestra que es posible, y esperamos que inspire más investigación que pueda conducir a aplicaciones en el futuro”, señala Isak Engquist.
Los resultados se publicaron en la revista científica PNAS (Proceedings of the National Academy of Sciences of the United States of America). La investigación se realizó con financiamiento de la Fundación Knut and Alice Wallenberg del Centro de ciencia de Madera Wallenberg.