Desarrollan en Vietnam bacteria para reducir nitrógeno en la atmósfera Copiar al portapapeles
POR: Alejandra Almed
28 mayo, 2019
El caso de la ganadería es popular pero también pasa con la agricultura. Gases como metano u óxidos de nitrógeno se emiten en grandes cantidades con los cultivos.
El cultivo de arroz es un ejemplo significativo de las emisiones contaminantes. Un equipo de investigación en Vietnam prueba una solución para aminorar el impacto de las emisiones de nitrógeno. El metano tiene un impacto 20 veces mayor en la retención de calor en la atmósfera que el dióxido de carbono, en el caso de óxidos de nitrógeno este llega hasta 300 veces más.
Mientras mayor sea la demanda de alimentos mayor será el impacto ambiental de nuestra producción de alimentos. Se estima que para 2050 la población mundial será de aproximadamente 9,800 millones de personas. Con ese nivel de población serán necesarios muchos alimentos y ahora lo que se busca es conseguirlos de una forma menos agresiva con el ambiente.
El arroz vietnamita para reducir emisiones de nitrógeno
Uno de los ingredientes principales para obtener cosechas abundantes de arroz en Vietnam son los fertilizantes. De estos se desprenden grandes cantidades de nitrógeno que se dispersan en el ambiente, tanto en ríos y lagos como en el aire. Aunque no es un problema particular de esta región del mundo, si se están tomando medidas especiales para reducir la presencia de gases derivados de él.
En Tien Hai, al sureste de la capital del país (Hanói) se realiza un experimento internacional. La intención es crear cultivos de arroz que no dependan tan fuertemente de los fertilizantes con nitrógeno y de esta forma se emitan menos gases de efecto invernadero. Esta temporada de trasplante será la primera y aún falta medir sus resultados. Si todo sale bien Vietnam habrá avanzado en la producción de alimentos amigables con el ambiente.
Aproximadamente el 50% del fertilizante que se usa para hacer crecer al arroz se evapora o se pierde en el desagüe. Lo que se propone en el experimento dirigido por la Doctora Pham Thi Thu Huong es crear plantas que capten el nitrógeno del aire y así requieran menos fertilizantes. Para esto se desarrolla una bacteria que acompañará a las plantas durante su crecimiento.
Para implantar a este aliado se da tratamiento especial a las semillas. Esta bacteria es común en la caña de azúcar y se probará los resultados que tiene en el arroz. Para que estas plantas experimentales la desarrollen se recubre las semillas con la bacteria. Se espera que mientras crecen la bacteria atrape el nitrógeno del ambiente para que la planta pueda tomarlo y se reduzca el uso de fertilizantes.
¿Funcionará en todo el mundo?
Se trata de un proyecto en Vietnam. Si bien, no es el único lugar en el mundo donde se siembra arroz, es pronto para considerar aplicarlo en otras partes. Todavía falta conocer los resultados del experimento. Si funciona podrá empezar a adaptarse a las condiciones climáticas y de terreno en otras regiones del mundo.
Se trata de un experimento en el que participan tanto científicos como empresas privadas. Si los trasplantes son exitosos y se confirma que la bacteria de la caña de azúcar es capaz de ayudar al crecimiento del arroz seguramente habrá réplicas fuera de Tien Hai. Se criaron durante 15 días en laboratorio y habrá que ver cómo reaccionan en el campo. Por ahora hay que esperar los resultados.