ESA publica las primeras imágenes a color capturadas por Euclid
7 noviembre, 2023
La misión Euclid tiene el objetivo de recolectar datos que nos ayuden a comprender la materia y la energía oscuras. Despegó el primero de julio de 2023 y este 7 de noviembre la Agencia Espacial Europea (ESA) publicó sus primeras imágenes a color del cosmos.
Las imágenes han superado las expectativas de la misión. Muestran con gran detalle las estructuras del cosmos donde se rastreará a la materia y energía oscuras.
Buscando trazos de materia y energía oscuras
El 95% de nuestro universo debe estar hecho de “entidades” oscuras. Sin embargo, no la percibimos como sí ocurre con la materia luminosa. Reconocemos su presencia por la influencia que tiene en los objetos celestes que le rodean pero por ahora eso es todo.
“La materia oscura une las galaxias y hace que giren más rápidamente de lo que la materia visible puede explicar; la energía oscura está impulsando la expansión acelerada del Universo. Euclid permitirá por primera vez a los cosmólogos estudiar juntos estos misterios oscuros que compiten”, explica la Directora de Ciencia de la ESA, la profesora Carole Mundell.
En los próximos seis años Euclid se dedicará a observar la forma, distancias y movimientos de miles de millones de galaxias a una distancia de hasta 10 mil millones de años luz. Con los datos que obtenga se creará el mapa del cosmos en tercera dimensión más grande de la historia.
Euclid tiene una gran capacidad para observar el cosmos. Desde un mismo punto de observación puede abarcar una parte considerable del cielo, hasta el 35%. Esto lo hace desde el espectro de luz visible y la luz infrarroja.
Los primeros objetivos de Euclid
Las primeras imágenes captadas por Euclid muestran todo tipo de objetos. Desde las estrellas más brillantes hasta las galaxias opacas. Las formas son nítidas, incluso en los acercamientos a galaxias distantes.
“Euclid dará un salto en nuestra comprensión del cosmos en su conjunto, y estas exquisitas imágenes de Euclid muestran que la misión está lista para ayudar a responder a uno de los mayores misterios de la física moderna”, señala la profesora Mundell.
El cúmulo de galaxias de Perseo es uno de los objetivos fotográficos publicados por la ESA. En la imagen que corresponde a esta región del cielo se observan mil galaxias que pertenecen a este cúmulo pero eso no es todo. También aparecen 100 mil galaxias adicionales en el fondo.
Muchas de las galaxias que se observan en la imagen del cúmulo de Perseo jamás se habían visto. El mapeo de su distribución ayudará a comprender mejor la forma del universo actual.
El cúmulo de Perseo se ubica a 240 millones de años luz de nuestro planeta. Es una de las estructuras más masivas que se conocen en el universo. Los astrónomos han demostrado que este tipo de cúmulos galácticos son posibles gracias a la presencia de la materia oscura.
La galaxia espiral IC 342, también conocida como Caldwell 5, fue otro de los objetivos iniciales de Euclid. Esta galaxia es similar a nuestra Vía Láctea. Se observó desde el espectro infrarrojo. Durante su periodo de funciones, Euclid fotografiará miles de millones de galaxias para estudiar la influencia de la materia y energía oscura en ellas.
Una imagen más de esta primera entrega es la galaxia irregular NGC 6822. Este es un objetivo importante porque para realizar el mapa 3D Euclid observará la luz de galaxias más allá de los 10 mil millones de años luz.
Muchas de estas galaxias distantes serán irregulares y serán bloques de construcción del universo temprano que posteriormente formarán galaxias como la nuestra. NGC 6822 es un ejemplo cercano, se ubica a 1.6 millones de años luz de la Tierra.
El cúmulo globular NGC 6397 fue otro de los objetivos fotografiados. Los cúmulos globulares son colecciones de cientos de miles de estrellas unidas por la gravedad.
NGC 6397 es el segundo cúmulo globular más cercano a nuestro planeta. Se ubica a 7,800 años luz de distancia. Antes de Euclid ningún telescopio había sido capaz de mirar un cúmulo globular en una sola observación. Además, la definición es lo suficientemente buena para distinguirlas entre sí.
La última imagen corresponde a la nebulosa del caballo, también conocida como Barnard 33. Forma parte de la constelación de Orión y es una zona de formación estelar.
Los científicos esperan encontrar en ella objetos en formación. Entre ellos planetas de masa similar a la de Júpiter en sus primeras etapas. También se busca ahí a enanas marrones y estrellas recién nacidas.
Estas primeras imágenes son una muestra de lo que es capaz de mirar Euclid. Su definición es única y nos permitirá ver grandes fragmentos del universo como nunca antes los habíamos imaginado.