La NASA propone hacer investigación seria sobre fenómenos aéreos no identificados Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
15 septiembre, 2023
Desde mediados del año pasado la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio estadounidense (NASA) ha mostrado interés en actualizar el tema anteriormente conocido como OVNI. El primer paso fue dar un nuevo nombre: fenómenos aéreos no identificados (UAP, por sus siglas en inglés).
El jueves 14 de septiembre la agencia anunció la implementación de un estudio independiente basado en evidencia sobre los UAP. Por mucho tiempo los objetos que aparecen en el cielo y sobre los que no se tiene claro de qué se trata han estado relegados a la pseudociencia.
Un estudio nuevo sobre un “viejo conocido”
El fenómeno OVNI (siglas de objeto volador no identificado) o UFO (unidentified flying object) es parte de la cultura popular estadounidense. Se encuentra en todo tipo de relatos audiovisuales. La imágen estereotípica de seres con cuerpos pequeños, cabezas y ojos grandes se relaciona automáticamente con objetos misteriosos en el cielo.
La información sobre este fenómeno ha estado restringida por décadas a las pseudociencias, que ofrecen muchas explicaciones fantasiosas sin evidencia. Una de las desventajas que esto provoca es que no hay datos confirmables sobre el fenómeno. Hay muchos relatos sin evidencia.
Ahora la NASA quiere jugar un nuevo rol en el estudio de este tipo de fenómenos. El cambio de nombre por UAP va acompañado de nuevas condiciones para la comprensión de estos objetos. Cuando se anunció el nuevo nombre se aclaró que las sospechas más fuertes sobre el tema apuntan a manufactura humana de naciones enemigas.
En 2022 se hablaba de China como uno de los posibles orígenes para muchos de los UAP registrados. Una de las posibilidades que baraja Carl Sagan en su libro “El mundo y sus demonios” en la década de los 90 del siglo pasado es que fueran de origen soviético y eso los convertiría en objeto de interés militar estadounidense.
Lo que busca ahora la NASA es el estudio de los objetos voladores que no se pueden clasificar como globos, aviones o fenómenos naturales. Para esto propone un estudio independiente.
Se ha nombrado a un director de investigación de UAP por parte de la NASA: Mark McInerney. Con esto la NASA se desvincula del Departamento de Defensa con quien se había manejado la información oficial sobre este tipo de objetos.
En junio de 2022 se anunció el estudio y para octubre se eligió a 16 miembros para realizar un estudio independiente. Para comenzar se pidió establecer el tipo de datos que serán necesarios para comprender este fenómeno, así como los tipos de análisis que pueden ser de utilidad.
La mayor parte del informe consiste en responder a estos puntos básicos. Ejemplo de esto es la propuesta de usar la flota de satélites que observan la Tierra desde una órbita baja. Con ellos se puede evaluar las condiciones ambientales.
Entre las recomendaciones está el uso de recursos de código abierto, recurrir a una extensión de su experiencia tecnológica y técnicas de análisis. Para obtener un conjunto de datos robusto se sugiere recurrir a sus aliados comerciales y federales.
Otra propuesta es crear un catálogo amplio con datos sobre observaciones de UAPs. Para ello se requieren formatos estandarizados. Esto ayudará a realizar análisis a partir de inteligencia artificial y máquinas de aprendizaje.
Por ahora no se cuenta con información suficiente para examinar de forma adecuada el fenómeno. De ahí que se proponga la creación de un portal en línea para que el público interesado pueda aportar datos sobre posibles avistamientos.
“Creo que en este contexto, lo resumiríamos como: si usted ve algo, recogemos datos de alta calidad sobre eso, porque entonces podemos aprender”, señaló Nicola Fox en una conferencia de prensa de acuerdo con Scientific American. Él es administrador del Directorado de Misiones Científicas de la NASA.
“Descubrimos que la NASA puede ayudar a todo el gobierno a través de la calibración sistemática de datos, múltiples mediciones y asegurar metadatos de sensores completos para crear un conjunto de datos que sea confiable y extenso para el futuro estudio del UAP”, se menciona en el comunicado oficial.