La sequía prolongada obliga a recortes en suministro de agua del Río Colorado Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
18 agosto, 2022
En los últimos 23 años el suroeste de Estados Unidos ha vivido bajo condiciones de sequía. Esto ha llevado a niveles mínimos de agua en la cuenca del Río Colorado. Ante la falta de acuerdos entre los estados que obtienen agua de ella, la Agencia Federal de Recuperación estadounidense ya anunció recortes en el suministro. El norte de México es una de las regiones afectadas por esta disminución en el suministro.
Un río que se seca
La Agencia Federal de Recuperación solicitó desde junio un plan conjunto entre los estados beneficiarios de la cuenca para reducir el consumo de agua. Se necesita ahorrar 4.2 millones de acres pie en la región. El plazo se estableció para mediados de agosto y las negociaciones no avanzaron. Por lo que la agencia intervino estableciendo ella misma los recortes.
El paisaje del Colorado ha cambiado drásticamente en los últimos años. El nivel del agua ha bajado lo suficiente para que se reconozcan a simple vista barcos que estaban hundidos en los lagos de la cuenca. En el lago Mead, cerca de Las Vegas, es posible ver cadáveres que llevan décadas hundidos. Para contener la baja en los niveles de agua se realizarán recortes en el suministro en la parte sur de la cuenca.
A partir de 2023 se retendrá el 21% de la asignación anual de agua proveniente del Río Colorado. Las entidades afectadas serán 7, de entre ellas Arizona será la que recibirá el mayor recorte con 730 millones de metros cúbicos menos. Nevada tendrá un recorte de 31 millones de metros cúbicos. Por otro lado, México tendrá 128 millones de metros cúbicos de agua del Colorado, lo que representa 7% menos. Uno de los estados que no sufrirá recortes es California, debido a que ya tiene un plan de ahorro de agua propio.
El Colorado es el quinto río más largo de Norteamérica. Su longitud es de 2 mil 333 kilómetros. Nace en un pueblo llamado La Poudre Pass, a 3 mil 100 metros de altura en las montañas Rocallosas. Termina en el norte de México, donde divide a Sonora y Baja California hasta desembocar en el Mar de Cortés. Las últimas dos décadas han sido difíciles para este enorme río.
"A lo largo de las dos últimas décadas, los dirigentes del Departamento han colaborado con los socios de la cuenca del río Colorado en diversas operaciones de respuesta a la sequía. Sin embargo, dado que los niveles de agua siguen disminuyendo, es necesario tomar medidas adicionales para proteger el sistema", explica la Agencia Federal de Recuperación en un comunicado.
"El empeoramiento de la crisis de la sequía que afecta a la cuenca del río Colorado se debe a los efectos del cambio climático, como el calor extremo y las escasas precipitaciones", señala Tommy Beaudreau, quien es Subsecretario de Interior. También aclara que las condiciones de sequía favorecen los incendios forestales y la alteración de ecosistemas. Ambos serán fuente de conflicto entre las entidades que se abastecen del Colorado según los pronósticos del funcionario.
Además del consumo humano directo, el agua del río cumple otras funciones como la generación de energía eléctrica. Los lagos Mead y Powell, donde se ubican las presas Hoover y Glen Canyon respectivamente, se encuentran al 28% de su capacidad. La sequía es un problema en más de un sentido. La región suroeste de Estados Unidos y norte de México enfrenta uno de los efectos del cambio climático, la acción inmediata es reducir el consumo aunque serán necesarias más en los próximos años.