Voyager 1 vuelve a enviar datos comprensibles Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
24 abril, 2024
En noviembre de 2023 la sonda espacial Voyager 1 comenzó a enviar datos sin utilidad sobre su estado de salud y los sistemas de ingeniería. Una entrada reciente del blog de la misión anuncia que finalmente, se volvieron a recibir datos útiles.
El siguiente paso para los operadores de la misión es ordenar a la nave que vuelva a enviar datos científicos nuevamente. La posición de la Voyager 1 es privilegiada y sus datos ayudan a reconocer lo que existe más allá de la región de influencia del viento solar.
Una viajera interestelar recuperada
Las gemelas Voyager de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio estadounidense (NASA), son las dos únicas naves espaciales activas que viajan por el espacio interestelar (el que existe entre dos o más estrellas). Gracias a ellas podemos conocer el medioambiente espacial fuera de la heliosfera.
El 14 de noviembre de 2023 la Voyager 1 dejó de enviar datos legibles a la Tierra. En ese momento los operadores podían enviar comandos y se mantenían las demás funciones normales.
Las sospechas se dirigieron a una de las 3 computadoras a bordo de la misión. Como se consideró que el origen de la falla estaba en el subsistema de datos de vuelo (FDS), se buscó una solución.
En marzo el equipo de ingenieros del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA envió comandos para revisar el FDS. Con esto confirmó que sí se trataba del FDS.
La conclusión fue que uno de los chips en el FDS, encargado de una parte de la memoria del FDS, era el responsable de la falla.
Al perder el código en esa región los datos científicos y técnicos quedaron inutilizables. Los ingenieros de la NASA no pudieron reparar el chip y decidieron dejar el código en otra región del FDS. Sin embargo, ninguna región tiene espacio suficiente para guardarlo por completo.
Ante esta limitación lo que se hizo fue dividir el código en secciones que se almacenaron en diferentes lugares del FDS.
También fue necesario hacer ajustes en esas secciones del código para garantizar que siguieran funcionando. En otras partes del FDS podía haber referencias a esa sección y era necesario actualizarlas.
El 18 de abril se envió el código encargado de empaquetar los datos de ingeniería. La respuesta llegó el 20 de abril.
La comunicación con la Voyager 1 requiere de varias horas. Las señales que se envían tardan 22 horas y media en llegar a la nave y el mismo tiempo es necesario para recibir la respuesta de vuelta en la Tierra. Esto se debe a que la distancia que la separa de nuestro planeta es de 24 mil millones de kilómetros.
Por primera vez en 5 meses el equipo de operadores de la misión recibió datos sobre la salud y el estado de la nave. En las próximas semanas seguirán reubicándose las partes afectadas del software en el FDS. Aquí van incluídas las porciones dedicadas a los datos científicos.
Las gemelas Voyager son las naves espaciales con más tiempo de servicio activo, más de 46 años. Su objetivo de estudio original eran los planetas exteriores y ahora viajan por el espacio interestelar.
El problema de comunicación con la Voyager 1 fue resuelto. Por ahora, las dos exploradoras interestelares nos siguen enviando información que nos ayuda a conocer el cosmos fuera de nuestro sistema solar.