La Gran Mancha Roja podría estar por desaparecer Copiar al portapapeles
POR: ChemaTierra
28 mayo, 2019
Por: Antonio Medina
La sonda espacial Juno se ha encargado de revelarnos muchos de los secretos de Júpiter, entre ellos, ha estudiado de manera exhaustiva la “Gran Mancha Roja” del planeta más grande del sistema solar, pero esta icónica marca del gigante gaseoso no es nada nuevo para los astrónomos, pues llevan estudiándola desde 1830, cuando fue estudiada a conciencia por primera vez, aunque calculan que ha existido por al menos 350 años.
Pero esta gran mancha en la superficie jupiteriana que conocemos desde hace poco menos de 200 años, podría estar a tan sólo 20 años de desaparecer.
Pero vamos por partes, tal vez no sabes lo que es exactamente la Gran Mancha Roja, así que lo explicamos de manera general como una enorme tormenta o un enorme remolino de altas presiones ubicado al sur del Ecuador del planeta, que podría existir desde hace más de 300 años. Se caracteriza por vientos de más 400 km/h y su diámetro es de unos 16,000 km, lo suficientemente grande como para cubrir 1.3 veces el diámetro de nuestro planeta.
Regresando al tema, el científico planetario del Laboratorio de Propulsión a Jet de la NASA, (JPL por sus siglas en inglés), Glenn Orton, líder de la misión Juno, ha comentado acerca del destino de esta masiva tormenta. De acuerdo con sus declaraciones, la Gran Mancha Roja ha mantenido su vórtice debido a las altas velocidades de entre 483 y 640 km/h que tienen sus corrientes de viento, pero al igual que cualquier tormenta, no puede continuar por siempre, a pesar de que esta en especial ya lleva varios siglos de existencia.
Desde hace algún tiempo, la Gran Mancha Roja ha estado encogiéndose. En algún momento de la historia esta tormenta fue tan grande que podía contener cuatro veces a la Tierra, pero con el tiempo ha perdido sus dimensiones y para cuando la misión Voyager 2 pasó a visitar a este planeta en 1979, la tormenta se había encogido tanto que solamente 2 Tierras hubieran cabido en este fenómeno atmosférico.
En abril del 2017, mientras la sonda espacial Juno pasaba por la gran mancha roja, se realizaron mediciones y detectaron que el tamaño actual de la tormenta es de 16,350 kilómetros, poco menos de 1.3 veces el diámetro de la Tierra. Y en tan sólo un par de décadas este fenómeno podría dejar de ser una gran mancha roja para pasar a ser un pequeño círculo rojo y tal vez en algún momento, simplemente será un gran recuerdo rojo, una pequeña cicatriz de una gran espinilla, que en algún momento tuvo Júpiter en su juventud.