Investigan fuga de aire en la Estación Espacial Internacional Copiar al portapapeles
POR: Luis Moctezuma
21 agosto, 2020
Una fuga de aire que comenzó a detectarse en 2019 está en proceso de revisión. Los miembros de la Expedición 63 de la Estación Espacial Internacional (EEI) pasarán el fin de semana en la sección rusa. No se había revisado antes por las operaciones de rutina como caminatas espaciales, así como llegadas o salidas de naves espaciales. Por ahora la fuga no representa un peligro para la tripulación.
¿Cómo revisar una fuga en el espacio?
En septiembre de 2019 se reconoció un ligero aumento en la tasa de fuga de aire. Este indicio fue reconocido tanto por la Administración Nacional de la Aeronáutica y el Espacio estadounidense (NASA) como por sus aliados internacionales. Los datos recopilados desde entonces no fueron suficientes para reconocer el origen a causa de las otras actividades que se realizan en la EEI.
El rango de fuga se ha incrementado discretamente. Esto ha llevado al equipo que opera la EEI a aislar la fuente, de esta forma podrán ubicarla y así proceder a repararla. Todas las escotillas de la estación permanecerán cerradas, esto permitirá que los controladores de la misión monitoreen la presión del aire en cada módulo. Esta maniobra no representa ningún riesgo para los tripulantes pero si los obligará a permanecer todo el fin de semana en el mismo módulo.
La estación se divide en dos bloques, uno de origen estadounidense y otro de origen ruso. Este fin de semana los 3 miembros de la tripulación: Chris Cassidy, Ivan Vagner, Anatoly Ivanishin, permanecerán en un segmento del laboratorio ruso. El módulo de servicio Zvezda los alojará entre la noche del viernes y la mañana del lunes.
La prueba de este fin de semana ayudará a determinar cuál es el módulo donde se encuentra la fuga. Los resultados estarán listos para el final de la próxima semana. Los especialistas analizarán estos datos desde la Tierra y tanto el equipo estadounidense como el ruso tendrán acceso a ellos para rastrear la zona donde se encuentra la tasa de aire de fuga mayor a lo normal.
Durante el fin de semana la tripulación de la EEI no pasará incomodidades. El módulo Zvezda está diseñado para servir como habitación. El equipo de la primera expedición que llegó a la estación el 2 de noviembre del año 2000 se hospedó ahí. Quizá se trate de un alojamiento con 20 años de antigüedad pero fue diseñado para eso y cuenta con los servicios necesarios para vivir en el espacio.
La maniobra de este fin de semana no representa un riesgo, por el contrario, ayudará a prevenir otros en el futuro. En este momento la fuga no es peligrosa para las operaciones que se realizan en la EEI, además, la tripulación es pequeña y hay poca actividad a diferencia de otros meses. Es un buen momento para hacer las revisiones necesarias y dar mantenimiento. También en el espacio es necesario tomarse un fin de semana para arreglar la casa.